El PNV pone en marcha la ponencia del “nuevo estatus” vigilado por el PSE
Aunque 2014 será un año de transición en lo que al futuro del “nuevo estatus” político que el PNV pretende para Euskadi, la dirección que encabeza Andoni Ortuzar aprobó en su reunión de ayer tarde el texto definitivo de la proposición no de ley que registrará el Grupo parlamentario este jueves en la Cámara vasca para poner en marcha la ponencia sobre la posible reforma estatutaria. Andoni Ortuzar, como líder del partido, y el portavoz parlamentario, Joseba Egibar, registrarán la proposición no de ley que servirá para la constitución de la ponencia, algo que no se materializará hasta febrero, dado que el parlamento arrancará sus tareas de nuevo ese mes para la mayor parte de los temas. Los partidos han acordado mantener habilitado el trabajo en enero solo para temas muy concretos, según confirmaron ayer fuentes socialistas.
La justificación incluida en la proposición no de ley “no fija la posición” del PNV en esta materia, según fuentes peneuvistas, aunque sí marca el terreno de juego donde se va a plantear en la segunda parte de la legislatura la partida sobre el futuro del Estatuto de Gernika y su posible reforma, así como la posibilidad de una consulta posterior a la sociedad vasca sobre el “nuevo estatus” político para Euskadi.
El PNV encara ese debate en el seno de la ponencia por partes: en una primera etapa, los peneuvistas pretenden discutir sobre las luces y las sombras de lo que han sido estos 35 años de autogobierno con el Estatuto de Gernika. “Ver las fortalezas y las carencias del autogobierno”, explican fuentes de la dirección, y abordar con el “mayor consenso posible” el futuro estatus de Euskadi, nación europea, como se recoge en el programa electoral, que incluye una consulta en 2015 a la sociedad vasca. Ahí tendrían cabida todo tipo de expertos, las experiencias de los lehendakaris que han dirigido esta comunidad autónoma desde que el Estatuto de Gernika fue aprobado el 25 de octubre de en 1979 y cuantos puedan aportar algo en lo que ha sido el desarrollo estatutario y de autogobierno vascos.
Ponencia parlamentaria en varias fases
En una segunda fase, la idea sería que los partidos planteen sus posiciones para “adecuar” la realidad estatutaria en la Europa del siglo XXI. Ahí, las cuatro sensibilidades políticas básicas en Euskadi podrán plantear sus posiciones, que van desde la reforma y actualización que defiende los socialistas, hasta dejar las cosas como están o incluso que el Gobierno central recupere determinadas competencias (como defiende UPyD) o abrir un proceso soberanista que incluya el derecho a decidir, la autodeterminación o directamente la independencia de Euskadi.
El líder de los socialistas vascos, Patxi López, dejó ayer claro que la sociedad vasca no está para subirse a ninguna “noria soberanista”. Y le pidió expresamente al lehendakari Íñigo Urkullu que no se deje llevar por “consultas secesionistas confusas”, como la planteada en Cataluña, o que siga anclado en “nuevos estatus intencionadamente inconcretos”. Además, le animó a centrarse en lo importante en 2014: la recuperación económica y la creación de empleo con planes concretos y no de mera “propaganda” y “pobre” en dotación presupuestaria, como acaba de apuntar el CES en su último informe en relación con el plan de empleo gubernamental. “Que no yerre en el tiro, que sepa distinguir entre lo que está demandando de forma urgente la gran mayoría de nuestra sociedad y lo que son aspiraciones de parte”, apuntó. Y le emplazó a que “como lehendakari lidere a la sociedad vasca en el camino de la recuperación económica, y no en el despeñadero soberanista”.
Los socialistas ya le dijeron en la reunión que mantuvieron con el PNV que no iban a poner palos en la rueda de la ponencia, pero que para el PSE-EE este asunto no tenía ninguna urgencia. Fuentes socialistas indicaron ayer que de aquella reunión sacaron la idea de que “el PNV se mueve entre el reconocimiento del derecho a decidir, la actualización del Estatuto en clave de blindaje de las competencias presentes y futuras en su relación con el resto de España, pero sin fijar una posición cerrada. Inconcretos en estos primeros compases”, explican en el seno de los socialistas vascos.
