PNV y Sortu se acercan aunque mantienen las diferencias
PNV y Sortu, la marca legal de la izquierda abertzale, llevan varios meses de lento deshielo. La reunión de hoy al más alto nivel no es más que la foto pública de una relación que, sin embargo, no está del todo encauzada. Hay materias como el fin definitivo de ETA o las políticas soberanistas en las que ambos partidos tienen un terreno común para andar juntos y tejer acuerdos, pero el PNV no ha querido ocultar hoy, al término del encuentro, las “muchas divergencias” que existen entre ambas formaciones.
De hecho, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha colocado el marco futuro de colaboración en los tres ejes que sirven de hoja de ruta para el lehendakari: “asentar la paz y la convivencia, sacar a Euskadi de la crisis y caminar hacia la normalización política de nuestro país que la ciudadanía pueda expresarse en libertad”. A juicio del líder peneuvistas, es “posible llegar a puntos en común”, aunque también ha precisado que ese esfuerzo lo está realizando el PNV con todos los partidos.
Tras el encuentro, el coordinador del Consejo Nacional de Sortu Hasier Arraiz ha considerado que “hay que poner en marcha nuevas dinámicas” que den lugar a “compromisos multilaterales para avanzar en la construcción de Euskal Herria como nación y en la resolución democrática del conflicto”. Tras hora y media, ambos partidos han coincidido en hablar de nueva etapa. En palabras de Arraiz, “la fase de los reproches queda atrás”.
Pero el hecho de que ambos partidos pugnen por liderar el mundo nacionalista y su electorado, en profundo cambio desde la decisión de ETA de octubre de 2011 de cesar definitivamente su actividad terrorista, les obliga a marcar el terreno casi a diario. Esto es más evidente en el terreno de la búsqueda de alianzas y pactos, pero también es muy perceptible en los discursos que sobre todo EH Bildu -tanto Laura Mintegi como Julen Arzuaga- realiza en el Parlamento vasco en relación con las políticas del lehendakari Iñigo Urkullu. En relación con los posibles pactos futuros, las delegaciones del PSE-EE y del PNV mantienen su ritmo negociador para tratar de lograr cerrar un acuerdo en materia de fiscalidad -esta misma semana se volverán a reunir- y los peneuvistas han fiado incluso la aprobación de los Presupuestos de 2014 al devenir de esas reuniones, dada la exigencia de los socialistas de abordar en las negociaciones en curso no solo la política de ingresos (fiscalidad y lucha contra el fraude y la elusión fiscales), sino también la de gastos.
Así, en el encuentro de esta mañana el PNV ha constatado las dificultades de llegar a un acuerdo fiscal con la izquierda abertzale. Ortuzar ve “lejos” un acuerdo en esta materia con Bildu porque “cada vez que dan un pasito para adelante ellos [por Bildu] se retraen dos”.
Deshielo en el Congreso
El encuentro no se ha celebrado en territorio neutral, ya que los dirigentes del PNV aceptaron reunirse con la izquierda abertzale en la sede de Sortu en San Sebastián. Aunque la próxima cita se celebrará en septiembre en Sabin Etxea, la sede peneuvista en Bilbao. Las delegaciones estaban encabezadas por los líderes de ambas formaciones, Andoni Ortuzar, por parte del PNV, y Hasier Arraiz, por Sortu. Completaban la reunión los dirigentes peneuvistas Joseba Egibar, Pilar García de Salazar y Koldo Mediavilla y los miembros de la dirección de Sortu, Rufi Etxeberria, Pernando Barrena y Maribi Ugarteburu.
El Tribunal Constitucional legalizó Sortu a finales de junio de 2012. Desde esa fecha, el partido heredero de la militancia de Batasuna ha ido normalizando sus relaciones con el resto de formaciones políticas, salvo el Partido Popular y UPyD. De momento, el deshielo con los populares se han ido realizando más en el Congreso de manera absolutamente informal con los diputados de la marca electoral abertzale Amaiur, aunque tampoco se ha producido ningún encuentro oficial.
