El Orfeón Donostiarra se interesa por el Bellas Artes de San Sebastián

Una vez que el edificio Bellas Artes de San Sebastián ha sido declarado Bien Cultural por el Gobierno vasco, sorteando así su transformación en un hotel de cuatro estrellas, busca un inquilino que garantice su viabilidad. Ernesto Gasco, portavoz socialista en el Ayuntamiento donostiarra, ha desvelado que el Orfeón Donostiarra se ha mostrado “favorable a adquirir el Bellas Artes negociando una permuta o cesión”, a lo que ha añadido que la sede actual de la Coral, en la calle San Juan, podría convertirse en el ambulatorio de la Parte Vieja.

Gasco ha realizado estas declaraciones en una rueda de prensa en la que ha anunciado, acompañado de la parlamentaria socialista, Susana Corcuera, que el grupo del PSE-EE en el Parlamento vasco ha registrado una Proposición no de Ley para su debate en la Comisión de Cultura, Euskara, Juventud y Deporte reclamando la implicación del Ejecutivo vasco en la protección de Bellas Artes y su “compromiso financiero para garantizar la viabilidad futura” del mismo.

El portavoz socialista ha explicado que los socialistas han mantenido reuniones con los propietarios actuales del edifico, la Sade, con la Agrupación Cívica para la Conservación del Patrimonio, Áncora, con el alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, y con los grupos municipales y “también con algún agente cultural de prestigio internacional, europeo y donostiarra para buscar una solución”.

A su juicio, “está bien que se recupere el patrimonio, pero también está bien que se le dé un uso al patrimonio porque si no, no existe”. Gasco ha apuntado que la Sade está dispuesta a vender el edificio “negociando un precio público con el Ayuntamiento de San Sebastián”. En este contexto, ha reclamado al Gobierno vasco que “también se implique porque si éste es un proyecto de país, también el país tiene que cofinanciar la rehabilitación, adquisición y su puesta en valor”.

Gasco también ha sugerido que el Bellas Artes podría ofrecer, además de sede al Orfeón, “una sala de cine más, con un cierto glamour” para el Festival de Cine donostiarra. “Yo creo que si somos la capital cultural de Euskadi se tiene que notar y también se merecería un compromiso cultural del Gobierno vasco con esta ciudad”, ha finalizado.