La RGI ya sostiene a 66.373 familias, su máximo histórico
El número de perceptores de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) no para de crecer mes a mes. En mayo ha vuelto a registrar su máximo histórico: 66.373 familias se sostienen gracias a esta ayuda social, lo que supone 41 más que el mes anterior. Así, el crecimiento de la RGI es más moderado en los últimos meses, con una media de un nuevo perceptor por día.
En la actualidad, dos de cada tres -42.375- son autóctonos y 16.699 pensionistas. Es decir, se trata de personas que completan los ingresos que obtienen procedentes de su pensión (contributiva o no) con la RGI. Las personas con pensiones de viudedad, de las más bajas, es uno de los colectivos que más se beneficia de este complemento.
El Gobierno vasco tiene previsto destinar este año 378,5 millones al pago de la RGI y otros 82,5 a la prestación complementaria de vivienda, dirigida a financiar el alquiler de pisos. En total, 461 millones, aunque la cifra definitiva dependerá de cómo evolucione el número de ciudadanos que cumplan las condiciones exigidas, ya que se trata de un derecho subjetivo reconocido por la ley al margen de que la dotación presupuestaria reservada al efecto sea suficiente o no. El dinero que Euskadi destina a las ayudas sociales supone más del 40% del total que se destina en todo España por este concepto.
Las condiciones de vida de la población vasca se resienten día a día debido a la crisis económica. Según el Instituto Vasco de Estadística-Eustat, cuatro de cada diez familias llegan a final de mes con apuros y más de la mitad (56%) considera que su situación económica ha empeorado en los tres últimos años.
Alfonso López, coordinador en Euskadi de EAPN, la Red Europea contra la pobreza y la exclusión social, recalca que aun siendo mala la situación en Euskadi, no lo es tanto como en el resto de España. “Tenemos una red de protección social más potente, pero los recortes también le están afectando. El sistema vasco de protección social precisa de una revisión. Pero en el buen sentido, no en el de los recortes”.
Cáritas Euskadi ha venido a corroborar el deterioro de la situación con sus últimos datos. Según la organización diocesana, la pobreza en Euskadi se cronifica: Cáritas atiende una media de 50.000 personas cada año.
