Tapia advierte de que Arcelor no debe “supeditar los tiempos” para la apertura de ACB “a lo que diga el Gobierno vasco”

La consejera vasca de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno vasco, Arantza Tapia, ha advertido a ArcelorMittal de que no debe “supeditar los tiempos” para la reapertura de la ACB “a lo que diga el Gobierno vasco” sobre posibles ayudas al proyecto. Además, ha asegurado que será “más rigurosa” con el fabricante de acero que con otras empresas, porque “tiene que demostrar que quiere hacer” en Sestao “una cosa diferente” a la de Zumarraga, donde su fábrica se encuentra en proceso de cierre.

Tras conocer la firma, por parte de los trabajadores de la factoría con la dirección de ACB, de un acuerdo sobre el plan industrial, la consejera ha advertido de que “la colaboración del Gobierno es un elemento adicional a que se ponga en marcha”, pero “no es imprescindible”.

En declaraciones realizadas en la noche de este pasado jueves a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, Tapia ha insistido en la necesidad de analizar “muy en profundidad” la propuesta de I+D de la compañía porque la colaboración en esta materia “requiere que la propia empresa aporte recursos e inversiones muy importantes”.

“Nosotros colaboramos, y la inversión pública es una parte, pero no es la mayoría. Analizar al detalle todos los datos nos va a llevar tiempo y, desde luego, vamos a exigir garantías de continuidad, de empleo, de que se van a hacer las inversiones aquí, de que se van a desarrollar los productos aquí y vamos a continuar teniendo una planta competitiva”, ha dicho.

“NO TENEMOS PRISA”

Tapia ha asegurado que el Gobierno evaluará los detalles “lo más rápidamente posible” pero también “lo más rigurosamente posible”. “Nosotros no tenemos ninguna prisa, los tiempos no van a estar supeditados a lo que diga el Gobierno. La planta, ACB, es de Arcelor, y si quiere abrirla, lo puede hacer mañana, porque tiene acuerdo con los trabajadores”, ha puntualizado.

En su opinión, “otra cosa” es que la compañía “recabe el apoyo del Gobierno en determinadas circunstancias” pero “desde luego, no es una condición 'sine qua non'”. “Y si es así, es que, realmente, estamos hablando de otra cosa, y no quiero pensar que estamos hablando de eso”, ha indicado.

Por ello, ha insistido en que el Gobierno vasco sigue aguardando a que se den garantías de continuidad al proyecto por parte de la compañía, “la propia empresa que está cerrando la planta de Zumarraga”. “Tenemos una serie de trabajadores, alrededor de 300 personas, que todavía están negociando el cierre de su planta y las reubicaciones. Es decir, ArcelorMittal tiene que demostrar que quiere hacer una cosa diferente en ACB. Es la misma empresa la que está jugando con las dos plantas, y digo jugando, muy consciente de lo que estoy diciendo”, ha manifestado.

La responsable vasca de Desarrollo Económico y Competitividad ha aclarado que las “ayudas y colaboraciones” que puede poner en marcha el Gobierno se refieren a la I+D, la eficiencia energética, formación de trabajadores o mejoras de gestión, “que ayudan a que la empresa sea más competitiva y a que los costes sean menores”. “Por lo tanto, igual que se hace con cualquier otra empresa que funciona en Euskadi y sin hacer ninguna particularidad. Es más, vamos a ser mucho más rigurosos en el caso de esta empresa, porque tenemos una cierta experiencia de no hace tanto tiempo”, ha aclarado.