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Lanbide planea prescindir de 80 trabajadores encargados de la RGI

Natalia González de Uriarte

Vitoria-Gasteiz —

El Departamento de Empleo y Políticas Sociales, del que depende Lanbide, ultima un borrador de la nueva relación de puestos de trabajo -RPT- del Servicio Vasco de Empleo que contempla la desaparición de 80 de los actuales puestos, según han manifestado al eldiarionorte.es fuentes del Gobierno. Ahora mismo, la plantilla de Lanbide la forman 875 personas y la RPT contempla 795 puestos de estructura.

Los primeros damnificados de este drástico recorte de personal podían ser los 210 trabajadores contratados hace dos años, cuando Lanbide asumió la gestión de la Renta de Garantía de Ingresos -RGI-. Su futuro está en el aire ya que los puestos que ocupan actualmente no han sido trasladados a la nueva estructura organizativa que diseña el Servicio Vasco de Empleo Público y que pretende aprobar a finales de año. Al parecer, según explican los denunciantes, tampoco podrán accceder a las vacantes surgidas tras la restructuración del servicio.

El personal que tramita la RGI, repartido por las 42 oficinas de Lanbide y servicios centrales, fue contratado en noviembre de 2011 para poner en marcha esta ayuda económica dirigida a personas sin recursos y que hasta ese momento gestionaban las diputaciones y ayuntamientos. Esa competencia se transfirió con carácter indefinido. Sin embargo, los trabajadores que se hicieron cargo del servicio optaron a él a través de contratos programas, bajo el epígrafe de 'funcionario interino para la ejecución de programa temporal'. Ahora, una nueva normativa aprobada por el Gobierno impide a estos trabajadores acceder a las comisiones de servicio. “Todos los funcionarios interinos -sin plaza fija- que llevan más de un año en un puesto tienen derecho a presentarse a cualquier comisión de servicios que se ofrezca. Esto garantiza el derecho a la movilidad y a la mejora. Pero al tener ese tipo de contrato se nos impide ejercer ese derecho amparándose en una norma que se han sacado de la manga” denuncian los trabajadores afectados que añaden “que no es lógico es que nos hicieran un contrato programa para llevar a cabo una labor que no es temporal, ya que es una competencia que se adquirió con carácter estructural y definitivo”.

El colectivo afectado lamenta además que Lanbide y el Gobierno vasco no tengan intención de contar con ellos “tras dos años de dedicación, muy difíciles, en los que cada día nos hemos involucrado y esforzado al máximo para sacar adelante la Renta de Garantía de Ingresos, siendo conscientes de que de nuestro trabajo dependían los ingresos de muchas familias y viviendo a veces situaciones muy duras con pocos medios técnicos, poco personal, incluso sufriendo agresiones y amenazas”.

Empleo no confirma el número de plazas a eliminar

Los recortes en personal afectarían de forma indirecta a los 61.500 perceptores de la prestación, que según los denunciantes, van a recibir un peor servicio al contar “con menos personal y peor preparado” en un área aquejada por los retrasos en la tramitación de expedientes. “Existe un peligro real de vuelta al caos, desorganización y deficiente atención de los primeros meses tras la transferencia de esta competencia. En su último informe el Ararteko ya alertó al Gobierno vasco de que se debían revisar urgentemente los recursos humanos que gestionan la RGI, ya que no eran suficientes para garantizar la eficiencia del servicio que presta”, alertan los trabajadores que añaden que no hay personal suficiente en Lanbide para gestionar la RGI. “Esta administración ha recurrido sistemáticamente a contratar los servicios de una empresa privada para llevar la tramitación, gestión y resolución de solicitudes que por ley están atribuidos al Servicio Vasco de Empleo”

Los trabajadores, reunidos en asamblea, han decidido iniciar una serie de movilizaciones y paros y no descartan convocar una huelga. “Según la poca información que nos llega sobre los movimientos que pretenden dar, van a proponer a la vez que la supresión de nuestos puestos, la creación de 130 plazas a las que no podremos optar por nuestra condición previa. Nos dejarán en la calle después de haber puesto en marcha la RGI y aunque a nosotros, oficialmente, no nos han comunicado nada, parece que quieren alargar nuestros contratos hasta junio y que durante este tiempo nos dediquemos a formar a las personas nuevas que entran”. De momento han emprendido una campaña de recogida de firmas de apoyo. A través de una carta que han hecho llegar a trabajadores de Lakua exigen “transparencia absoluta en este proceso e igualdad de trato con respecto al resto de colectivos contratados como interinos; que la RGI se contemple dentro de la RPT como servicio de estructura y, como consecuencia, quienes trabajamos en este servicio tengamos derecho a la adscripción a puestos de estructura vacantes en condición de funcionario interino y acceder a las comisiones de servicio de Lanbide y Gobierno vasco al igual que el resto de colectivos”. Hasta ahora cuentan con 628 firmas de apoyo a ese documento.

El Departamento de Empleo y Políticas Sociales no ha querido referirse a este respecto aunque ha admitido a eldiarionorte.es que el proceso de restructuración del servicio está abierto pero “todavía no está confirmado el número de plazas que se van a eliminar”.

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