Urkullu confía en volver a crear empleo, pero dice que la crisis no se arregla “por decreto”

El lehendakari ha mostrado su preocupación por la evolución del desempleo en Euskadi, pero ha advertido contra “parcheos” para salir de la crisis y ha señalado que “esta situación no se arregla por decreto”. Urkullu ha admitido que el crecimiento del paro -que ya supera el 17% en el País Vasco, según los datos conocidos hoy- “nos mueve a la preocupación y a la ocupación”, frente a las críticas de “inacción” de su Ejecutivo.

A su juicio, de cumplirse los indicadores“ positivos” Euskadi podrá recuperar la “esperanza”. Según ha asegurado, el Gobierno está preocupado, pero también “ocupado” en consolidar una estrategia “no de parcheo”, sino que conduzca a la creación de empleo. “Superada la recesión, nuestro objetivo es crecer. Estamos en condiciones de poder crecer un 1% este año y un 1,5% el año que viene, y sobre estas bases, podremos volver a la creación neta de empleo”, ha manifestado.

Pero ha señalado que “esta situación de crisis no se arregla por decreto” y confía en que los “indicadores positivos” que ya se aprecian en “exportación, la actividad industrial, las líneas de crédito”, entre otros, tengan su repercusión en la segunda parte de la legislatura.

575 millones de euros

Urkullu ha comparecido tras el Consejo de Gobierno vasco para presentar las líneas básicas del Plan de Industrialización para el periodo 2014-2016, dotado con un total de 575 millones de euros, al que su Gabinete ha dado luz verde este martes.

El lehendakari ha asegurado que el plan, que se remitirá ahora al Parlamento vasco, ha sido sometido a contraste desde el pasado mes de enero porque el deseo del Ejecutivo es contar con “el apoyo político y el clima de consenso necesario” para garantizar su “máxima eficacia”. A su juicio, este, proyecto que enlaza con el contexto de la estrategia Europa Horizonte 2020, pretende consolidar el peso de un sector que ha perdido peso en los últimos cinco años de crisis, pero que “se mantiene con una aportación al PIB por encima de la media europea”.

Urkullu ha afirmado que, de acuerdo con el nuevo plan industrial, las respuestas empresariales “individuales, sectoriales, y de país” deben “incorporar la perspectiva global”. Se ha sumado, en este sentido, al “renacimiento industrial” por el que abogan potencias mundiales como EE.UU., Japón o Suecia, en los que se apuesta por una industria manufacturera que genere competitividad y empleo en el propio país“.

Por ello, el Gobierno vasco demandará a las empresas “una responsabilidad social con su entorno” y será “exigente” para rodearse de “implantaciones productivas tractoras que atiendan a los proveedores locales” y colabore “en proyectos de país”. Según ha dicho, los retos del Plan buscan “garantizar el formalecimiento de la industria vasca” además de “consolidar y recuperar” su peso, ya que supone el 25% del PIB de Euskadi. Además, ha destacado que “por cada nuevo empleo de industria, se generarán entre 2 y 5 empleos” en el resto de actividades.