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Los agentes sociales le sacan los colores al Plan de Empleo del Gobierno

Los trabajadores de Fagor-Edesa durante una manifestación.

Eduardo Azumendi

Vitoria-Gasteiz —

Fondos insuficientes, mera recopilación de políticas desarrolladas por cinco departamentos en lugar de un plan extraordinario, ausencia de programas para el fomento del empleo de las personas paradas de más de 45 años...Estas son algunas de las carencias que denuncia el Consejo Económico y Social (CES) al analizar el Plan de Empleo 2013-2016 elaborado por el Gobierno vasco. El CES es un organismo consultivo dependiente del Parlamento vasco que está integrado por sindicatos, empresarios, la universidad, las cajas de ahorro y otros colectivos.

En un informe aprobado por el pleno del CES, este organismo consultivo se muestra conforme con el objetivo del plan de considerar prioritario el empleo, pero a partir de ahí todo son críticas. El Consejo observa una “insuficiente implicación de la iniciativa pública como agente impulsor de la actividad y el empleo” y, además, el documento no es un plan extraordinario, “que es lo que la situación requería”, sino una “auténtica recopilación de políticas desarrolladas por distintos departamentos”.

En relación con los recursos asignados, el Consejo señala que tras la cifra global de 3.315 millones de euros para el periodo de vigencia del plan, “se descubre que el esfuerzo presupuestario alcanza únicamente los 960 millones, es decir, el 28,9% del total, para un periodo de cuatro años. Eso se traduce por un esfuerzo de 240 millones cada año. También resalta que los ejes de actuación del plan deben guardar ”coherencia“ con ”otras políticas y marcos de planificación estratégicos“ y que los programas deben tener ”mayor correspondencia con las debilidades y amenazas detectadas“.

En este aspecto, el Consejo Económico y Social cita algunos planes (inmigración, apoyo a las familias, igualdad y servicios sociales) que “no se corresponden, después, con ningún eje ni línea de actuación”. El dictamen del CES también pide que se revise la consideración de los colectivos prioritarios del plan y muestra una desagradable “sorpresa” por la “ausencia de programas para el fomento del empleo de las personas paradas de más de 45 años”, que son el 40% de los desempleados“.

“Publicidad de la mala”

Considera positivo el esfuerzo de inserción para jóvenes menores de 25 años, aunque “no se tiene en cuenta acciones para un problema específico de una parte muy importante de este colectivo, que es su falta de cualificación”. Por otro lado, echa en falta o Vasco debería hacer hincapié en el papel de las mujeres en el mercado de trabajo, algo que “no está reflejado en ninguno de los ejes ni programas planteados”.

Desde la oposición han arreciado las críticas al plan del Gobierno. “El plan de empleo no era más que propaganda, porque era pobre en las propuestas, escaso en los recursos y no tenía una apuesta clara y decidida por la creación de empleo y la estabilidad laboral”, ha comentado el secretario general del PSE, Patxi López. “Es una especie de recorta, pega y colorea de lo que ya había, empeorándolo además y presentándolo como novedad. Es decir, publicidad y de la mala”.

Para EH Bildu se trata de “pura propaganda sin contenido real”. “Este plan no es efectivo para la reactivación del empleo. El problema del plan de empleo está en su origen, porque la gran prioridad del Ejecutivo no era plantear medidas realmente efectivas, sino cuidar su imagen pública”, ha denunciado la coalición.

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