Una sociedad pública de golf recibe en cinco años dos millones para compensar pérdidas
Los presupuestos de la Diputación alavesa proyectan para el próximo ejercicio 360.000 euros en previsión de pérdidas para la sociedad pública Naturgolf, creada por el ente foral para gestionar el complejo deportivo de dos campos de golf, el levantado en la localidad alavesa de Urturi de 18 hoyos y el ya cerrado cercano al pueblo de Lagrán, de 9. Esta cantidad se suma a los 1.634.000 euros ya desembolsados por el anterior equipo de Gobierno popular durante la pasada legislatura. El primer año, en 2012, fueron 463.000 euros, la misma cantidad que en 2013 al prorrogarse los presupuestos forales. En el año 2014 fueron 350.000 euros, y en el presente año 2015 se volvieron a inyectar en enero 358.000 euros.
Ahora, el nuevo Gobierno, compuesto por el PNV y el PSE, pospone de nuevo la decisión que se ha planteado el ente foral en varias ocasiones pero sin llegar a conclusiones firmes. ¿Se debe seguir haciendo frente a estas compensaciones por pérdidas o ha llegado el momento de reconsiderar la situación?. No es la primera vez que se lanza la pregunta pero de nuevo se deja sin respuesta.
Desde el Gabinete del Diputado Ramiro González explican que se presupuestan para el 2016, 360.000 en previsión de pérdidas pero esto no es más que un mero “formalismo”. “Es la misma cifra que se presupuestó el año pasado porque hasta febrero no se cierra el ejercicio y es imposible saber a ciencia cierta las cifras definitivas”, matizan. A juzgar por sus explicaciones el Gobierno foral espera, en esta ocasión, reflotar el complejo deportivo y no ejecutar esa partida prevista en el proyecto presupuestario. “La gerencia de Naturgolf va a presentar un plan de actuación que, esperamos, tenga resultados en 2016 y que las pérdidas no sean las que están presupuestadas”.
En cualquier caso, con esta nueva inyección contemplada en las cuentas, en total, en cinco años, de las arcas públicas forales se van a destinar casi dos millones para tratar de reavitalizar unas instalaciones deficitarias desde su inicio y que no acaban de remontar.
De uso “minoritario y elitista”
El debate está servido. En tiempos de contención económica la oposición cuestiona el empeño de la institución foral por dar continuidad a este servicio y discuten la utilidad pública del mismo. Desde las filas de EH Bildu se han mostrado contrarios a alargar la vida de esta sociedad pública a base de transfusiones anuales de dinero pero que no consiguen atajar la enfermedad del complejo. “Es un desastre total y absoluto. No tiene ningún sentido mantener esas instalaciones. De hecho sale más barato pagar a los trabajadores por quedarse en casa que abrir a diario el campo de golf con los gastos que conlleva ese mantenimiento”, ha declarado Luis Salgado.
El procurador del grupo juntero de Podemos Koldo Martín se manifiesta en los mismos términos. Sostiene que Naturgolf económicamente es un “agujero negro de grandes dimensiones” y lo único que se consigue con esas inyecciones anuales de dinero es aumentar la deuda. “El problema ya no es que se trata de una sociedad pública que ningún año ha registrado beneficios y sino que sus pérdidas son ya inasumibles”, ha resaltado Martín. El portavoz de Podemos considera que “el próximo año será un buen momento para tratar de poner fin a esas instalaciones que se ha demostrado que no tiene más recorrido. Es una zona preciosa en la que se pueden potenciar otras alternativas como paseos a caballo, circuitos de ‘mountain bike’. Además, nos consta, que mucha gente de la zona no está contenta con el complejo deportivo”.
Damián García, portavoz de Irabazi en las Juntas Generales, se muestra partidario también de poner fin a la sangría económica. “Es un pozo sin fondo. Hay que buscar nuevas alternativas a ese espacio. No se puede mantener por más tiempo un servicio del que no se está beneficiando la mayoría de la sociedad de ese enclave. Es de uso minoritario y elitista y está acumulando pérdidas”.
