Los contratos de menos de un mes suponen ya el 40 % del total de la contratación de la última década
Menos de un mes. Esa es la duración del 40 % de todos los contratos laborales que se han suscrito en Euskadi en el periodo 2009-2017, los años de la crisis. Una tendencia que es consecuencia de la crisis y que ha llegado para quedarse, según se desprende del estudio Análisis de la contratación notificada en Euskadi en el período 2009-2017, elaborado por el Consejo de Relaciones Laborales de Euskadi. El período analizado abarca los años de la crisis económica (que se ha llevado por delante un 4,1 % del Producto Interior Bruto de la comunidad autónoma) y la salida de la misma.
Los datos se basan en el estudio de las personas que han suscrito contratos de trabajo en Euskadi en el período 2009-2017, analizándose las características que tienen estos contratos (tipo de contrato duración etc.).
La primera conclusión es que los contratos temporales representan la gran mayoría de la contratación: en torno al 93 %. El recurso a la contratación temporal es común a los grandes sectores de actividad: en todos ellos viene a representar cerca del 90 % de la contratación total.
Los contratos temporales de menos de una semana de duración, junto a los de duración indeterminada, suponen en conjunto en torno al 69 % del total de contratos que anualmente se suscriben. En el extremo opuesto se sitúan los contratos temporales con un año o más de duración que apenas suponen de media el 0,8% del total en el período analizado. Así, los contratos temporales de hasta un mes de duración acaparan en torno al 40 % de todos los contratos.
La industria y el sector servicios, y dentro de este último la rama de la hostelería, son los que más utilizan los contratos temporales de hasta una semana de duración, mientras que en el sector primario y en la construcción prevalecen los contratos temporales de duración indeterminada.
Multicontratación
Entre 2009 y 2017 disminuye el peso de las personas que firman un único contrato al año, mientras que aumenta el número de los que suscriben dos contratos o más. El mayor aumento se produce en el colectivo que firma 11 o más contratos por año. En 2017 los trabajadores que firmaron más de 11 contratos supusieron el 5,4 % del total de las personas contratadas.
Las ramas de actividad con mayores índices de multicontratación (peso de personas que firman seis o más contratos al año) son: limpieza y jardinería, actividades sanitarias y de servicios sociales, hostelería y comercio.
Otra de las conclusiones es lo mucho que cuesta acceder a un contrato indefinido. Poco más de un tercio lo consigue y el plazo de tiempo requerido en promedio es de 35 meses. Las mujeres y las personas menores de 30 años lo consiguen en mayor proporción pero tras haber acumulado un mayor número de contratos temporales.
Y lo que es peor, en un elevado porcentaje la suscripción de un contrato indefinido no se traduce en una vinculación temporal larga de la persona con la misma empresa, según el informe.
Para la secretaria de Política Sindical de UGT-Euskadi, Maribel Ballesteros, “muchas empresas se han hecho adictas a la contratación temporal”. “Sea para un empleo fijo o no, lo primero que realizan las empresas es un contrato precario”, lamenta. “Mientras a las empresas les sea más barato defraudar en contratación que pagar la multa si les pillan, seguirá existiendo precariedad”.
A la Confederación Empresarial Vasca-Confebask no le sientan nada bien la cada vez más recurrentes críticas sobre la precariedad del mercado laboral de Euskadi. Según los datos de Confebask, el índice de temporalidad en el País Vasco es hoy “menor que incluso antes de la crisis”. En este sentido, el presidente de los empresarios vascos ha asegurado que ocho de cada diez trabajadores (el 78 %) tienen a “día de hoy” un contrato indefinido, un porcentaje diez puntos superior al del sector público. “La consolidación de la buena marcha de la economía está generando empleo de mayor calidad”.
Lo cierto es aue en 2017, tras varios años de crecimiento económico, parece atisbarse una evolución algo más favorable que la observada en años anteriores en cuestiones como el índice de rotación, crecimiento y presencia de los contratos indefinidos, relevancia de las personas con un único contrato al año. Pero solo “futuros análisis permitirán ver si estos indicios marcan realmente una nueva tendencia”, apunta el Consejo de Relaciones laborales.
