“La gente está echando con su voto a los corruptos”

El periodista y escritor Bonifacio de la Cuadra (Úbeda, 1940) ha sido durante décadas cronista de la vida judicial y política española. Siguió muy de cerca la elaboración de la Constitución de 1978 y de esa etapa surgió, junto a la también periodista Soledad Gallego-Díaz y colega en el diario EL PAÍS, el libro 'Del consenso al desencanto', la primera crónica secreta de la elaboración de la Carta Magna. De la Cuadra ha vuelto a echar la vista atrás para realizar en su nuevo libro 'Democracia de papel' una crítica feroz al poder, desde la transición -“en miníscula, para no endiosarla”, precisa- hasta la corrupción de nuestros días. Ve, “en general”, a los políticos en esta nueva etapa más preocupados “por los votos que por los valores”.

Más que “cargarse la Constitución” de 1978 y abrir un proceso constituyente, como exige Podemos, De la Cuadra lo que defiende es una revisión de la Carta Magna. “Y sobre todo cambiar las actitudes de los constituidos y que los gobernantes ejerzan el poder de una forma decente y pensando en los ciudadanos y no en su lucro personal”. Aboga abiertamente por que la ciudadanía se pronuncie en una consulta tanto para Cataluña como para la monarquía española. “Esa cosa de no aceptar que los ciudadanos se pronuncien en Cataluña no se entiende, y es lo mismo que ocurre en el caso de la monarquía. El referéndum le conviene a Felipe VI y a la democracia”, vaticina.

En su nuevo libro usted escribe la transición española en minúscula, ¿por qué?

Pues precisamente para no endiosarla. Estoy de acuerdo con ella, pero no tanto como para ponerla en mayúscula. Las minísculas son más democráticas.

¿Y la corrupción en 2014 debe ir en mayúscula?

La corrupción la pongo en todos los casos con mayúscula. La C, la O... (sonríe).

Porque cree que no es para menos, imagino.

Está muy mal. Pero ahora la gente ha decidido que no aguanta más y les está echando a los corruptos con el voto. Antes no había un reproche social por la corrupción. Y lo que ha habido además durante mucho tiempo es apoyo electoral. Nadie se lo quería creer. Hay que aprovechar lo que está pasando ahora porque esto tampoco creo que sea eterno.

En el libro se destila su preocupación por los derechos humanos: habla de la 'ley Mordaza', del restrictivo nuevo Código Penal. Pero tampoco es nuevo, ahí está la 'Ley Corcuera' en la etapa socialista.

Y en el Franquismo.

Bueno, pero me refiero a la etapa democrática.

Si en la Constitución se establece que en ningún caso puede haber tortura, no se le puede dar la vuelta mediante una ley antiterrorista que establezca hasta diez días de incomunicación total sin defensa para no se sabe qué.

¿Pero el PP, por qué opta por estas leyes tan restrictivas con la libertad de expresión, de reunión, etc?

El PP, lo peor de todo, es que bebe en la Constitución cuando su antecesor político, que era Alianza Popular (AP), la mitad votó en contra. Esa Constitución de 1978 no la querían. Aznar escribió artículos en contra de la Constitución en esa época. Los temas de falta de derechos y libertades son una violación plena de la Constitución. Gregorio Peces Barba se batió el cobre para meter los derechos humanos en la Constitución y fue el Gobierno socialista el que estableció la misma ley antiterrorista contra la que se había manifestado Peces Barba; y que fuera Juan María Bandrés (EE) el que manifestó lo que Gregorio dijo en la oposición, ¿cómo fue posible? Hombre el tiempo de plomo del terrorismo fue muy duro, pero no se pueden decir esa cosas, que recojo en el libro, de que los derechos humanos no son para los terroristas, como dijo Felipe González. No se puede decir.

Pues acaba de estar en Venezuela para dar cobertura a la oposición a Maduro y velar por los derechos de los opositores en prisión, como es el caso de Leopoldo López.

Aunque vaya a Venezuela a lo que vaya. Pues muy bien, pero los derechos humanos no han sido su fuerte. Los socialistas hicieron en esa época otras cosas en materia económica, en conseguir que las fuerzas armadas dejaran de ser un peligro, en generalizar la sanidad pública, la educación, pero la joya de la Corona son los derechos humanos. Y aquello de potenciar los ministros del Interior, frente a los de Justicia. En fin.

Ha hablado de la tortura. El Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo ha condenado a España en cinco ocasiones en los dos últimos años y medio por no investigar denuncias de torturas.

El tribunal de Estrasburgo no dice que haya torturas, pero pide control judicial en relación a la aplicación de la ley antiterrorista.

Dedica el libro a sus cuatro nietos. Y espera que puedan disfrutar en el futuro de una “democracia fuerte”, porque ahora su abuelo tiene que lidiar con una “de papel”.

Pero eso es por el deterioro institucional. Enrique Tierno Galván recordaba que la Constitución era para ir hacia una democracia avanzada, pero es lo que no se ha hecho. Es como lo de la elección del Consejo General del Poder Judicial, y se decía aquello de “los nueve del PSOE y los nueve del PP”. Y yo me preguntaba, ¿pero qué pasa, es que son de ellos, los han comprado? Se han aprovechado de las instituciones, y cuando ha llegado este ministro Gallardón, de repartírselo, se ha pasado a quedárselo el PP. Todo eso, las listas cerradas, lo difícil que es sumar las firmas para presentar una Iniciativa Legislativa Popular etc, eso ha producido un deterioro grande de las instituciones.

Habla del sistema de partidos y sus miserias. ¿Se ha quebrado el bipartidismo definitivamente? ¿Se debe romper el candado de 1978 y abrir un proceso constituyente, como defiende Podemos?

Cargarse la Constitución no tiene sentido, y lo del proceso constituyente tampoco lo tiene. Y creo que cada vez Pablo Iglesias lo dice menos, aunque sea por la proximidad de Manuela Carmena, un ejemplo por cierto de alguien que se creyó la Constitución y que la ha intentado aplicar en todas sus facetas: como jueza de vigilancia penitenciaria pateó las cárceles, etc. Creo que, al final, lo llevarán a una revisión del deterioro institucional y de la corrupción. Y cambiar las cosas anacrónicas que tiene la Constitución. Y sobre todo cambiar las actitudes de los constituidos y que los gobernantes ejerzan el poder de una forma decente y pensando en los ciudadanos y no en su lucro personal. A Podemos en el libro solo le dedico un párrafo. El que se refiere a esos expertos en demoscopia que en las elecciones europeas no supieron ver los cinco eurodiputados del partido de Iglesias. ¿Sabes quién lo descubrió? 1,2 millones de ciudadanos. Pero también estoy viendo que los emergentes buscan más los votos que los valores, en general los políticos están obsesionados con los votos.

Describe el panorama, un tanto desolador, de los medios de comunicacion y el papel que jugaron en la Transición. Su ejercicio favoreció la democracia, dice, pero “en las últimas décadas los compromisos políticos y económicos de los medios hace más difícil mantener el nivel del oficio”, sostiene.

Yo no estoy en el ejercicio día a día, pero veo las tristeza con la que trabajan. Y lo contentos que estábamos nosotros en colaborar para construir la democracia.

¿Cuál es la labor del periodista en este momento de crisis?

En nuestra época había un insobornable deseo de crítica, no nos casábamos con nadie. Los socialistas estaban acostumbrados a que criticáramos a UCD y pensaban, al llegar al Gobierno. que íbamos a seguir con ellos. Por eso en el libro hay un subcapítulo titulado “amiguetes”. ¿Amigos con los políticos? bueno, ya veremos, pero de 'amiguetes' nada. Pero sobre lo que preguntas no tengo duda de que la crisis también ha tenido su influencia. No hay muchos medios, están los periódicos digitales, el bajón en la publicidad... Los bancos son los que están pagando la deuda de los medios y vas a ponerte justo a sacar un escándalo...

¿Cómo ve todo lo que está sucediendo en Cataluña desde el fallo del Tribunal Constitucional sobre el Estatut?

Si en el 78 se aceptan las nacionalidades en este país, que son naciones y ya costó meterlo porque Manuel Fraga no quería, ¿cómo puede ser que 30 años después el PP hiciera la barbaridad de oponerse a ese Estatuto y recurrirlo al Constitucional? Los magistrados del Constitucional se la pueden coger con papel de fumar para decir que la palabra nación se puede utilizar en el preámbulo, pero no tiene fuerza normativa. Decir que España es un Estado nación de naciones, pues la verdad no pasa nada. El error fue recurrir un Estatut que había sido refrendado y que ya habia pasado por la comisión constitucional en el Congreso en la que estaba Alfonso Guerra.

¿Y la propuesta de la reforma de la Carta Magna en clave federal del PSOE puede hacer encajar los nacionalismos vasco y catalán?

Se ha alimentado desde Madrid un nacionalismo, sobre todo en Cataluña, que seguramente a lo mejor ni siquiera habría sido tan fuerte si se hubiera dejado votar con normalidad la consulta. Esa cosa de no aceptar que los ciudadanos se pronuncien no se entiende, y es lo mismo que ocurre en el caso de la monarquía. El referéndum le conviene a Felipe VI y a la democracia. No apostemos sobre lo que va a pasar, hagamos la consulta y si luego hay que iniciar un proceso de reforma de la Constitución, que tiene su complicación, ya se hará. Porque igual la gente acepte el modelo con este nuevo monarca.

Entiendo que es un firme defensor de la consulta en este caso, pero también en el de Cataluña.

Sí, sí. Tambien. Yo lo que creo es que Cataluña debe de estar incrustada en España, pero el reconocimiento de su realidad, su lengua, etc. Creo además que es gente que no está incómoda en España, salvo cuando la 'bota de Madrid' les ataca y les martiriza.