Los escenarios del horror de ETA, testigos mudos de un mundo arrebatado
“Las fotografías resaltan a gritos aquello que no se ve en la imagen, los asesinados”. Así describe Florencio Domínguez, director del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, la exposición fotográfica 'A la hora, en el lugar' de Eduardo Nave (valencia, 1976), en la que muestra los escenarios de los crímenes de ETA capatados años después del drama y donde las ausencias de las víctimas son, paradógicamente lo más llamativo. Esas víctimas siguen presentes de algún modo para impedir que se pase página a un pasado “duro y violento” como el que ha sufrido Euskadi por culpa de ETA, según Domínguez.
La exposición, organizada por el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo y la Fundación Fernando Buesa, permanecerá abierta hasta el 26 de junio en el Centro Cultural Montehermoso, en Vitoria. 'A la hora, en el lugar' tiene detrás un gran trabajo de documentación. Cinco años (2008-2013) recorriendo espacios cotidianos y hasta “anodinos”, en los que un día los terroristas “esperaron agazapados” a sus víctimas. Enclaves en donde la organización terrorista ETA ha cometido un atentado desde la década de los sesenta hasta la actualidad.
Y allí “se somete a la naturaleza de los hechos perpetrados”. El mismo día, a la hora exacta (solo que unos años más tarde de cometerse el crimen), se presenta en el escenario preciso y realiza una toma fotográfica. 'A la hora en el lugar' es “un retrato de la pérdida y de la ausencia, pero, sobre todo, es el reconocimiento de un mundo arrebatado.
Las 35 fotografías que componen la muestra se presentan al público acompañadas por titulares de prensa, transcripciones de las noticias emitidas por las radios, grabaciones de vídeo y audio de los escenarios, así como su localización geográfica en un mapa.
Durante la presentación de la exposición, Domínguez ha advertido del peligro de querer pasar página “sin hacer la debida justicia a las víctimas”, y ha opinado que “ninguna sociedad puede dejar atrás de la noche a la mañana un pasado tan duro y violento”. También ha advertido de que “ETA se ha detenido pero sigue existiendo en la clandestinidad porque cree que tiene algún papel en el futuro del País Vasco o pretende tenerlo”.
