“La figura de Peret ha sido incomparable en la rumba catalana”

Chacho, Ramonet, Gato Pérez, los Hermanos Montenegro… son muchos los que comenzaron a hacer rumba catalana durante los años 60. Sin embargo, hay una figura que destaca entre todos ellos, Peret. En el documental ‘Cuchíbiri, cuchíbiri’ se cuenta la historia de la rumba según este artista, ya que según el director Carles Prats, hay muchos grandes artistas que en la rumba catalana, pero no nadie que haya hecho tantos discos, tantas canciones y que haya vendido tanto en época tan diferentes. “Esto sitúa a Peret en una posición absolutamente diferente ante los demás”, destaca. El documental se estrenó hace un par de años y Prats destaca que lo que más le llega del público es que la gente se sorprende mucho porque no conocía esta historia “yo creía que era una historia más conocida, pero no”. Este jueves se presentaba ‘Cuchibiri, cuchibiri’ en la Sección a Muestra del Festival de Cine Documental Musical de San Sebastián.

¿Qué es lo que se cuenta en este documental?

Es una aproximación al tipo de rumba que se llamó rumba catalana, hubo quien lo llamó rumba pop, que se ha discutido bastante el origen. Pero el origen está en el antiguo barrio del Portal en Barcelona en la calle de la Cera y la música que hicieron Peret y sus colegas. Fueron los primeros en hacer este tipo música que tenía influencias desde los mambos de Pérez Prado hasta el rock and roll de Elvis Presley. Es una música evidentemente urbana, divertida y que al principio se hacía con esta forma peculiar de tocar la guitarra que se llama ventilador, nombre que le puso Gato Pérez muchos años después, que consiste en rasgar las cuerdas y al mismo tiempo utilizar la caja de guitarra como percusión.

¿Por qué tu interés en realizar este documental y por qué desde el punto de vista de Peret?

A mí es una música que me interesaba mucho porque desde pequeño he escuchado rumba por la radio, entonces me apetecía contar esta historia y me apetecía hablar de este personaje central que es Peret. Me parece que la figura de Peret ha sido incomparable en este estilo musical. Es como si en rock and roll hubiera sido Elvis y los demás fueran mucho menores. Por lo tanto hay muchos grandes artistas que en la rumba catalana, pero no alguien que haya hecho tantos discos, tantas canciones, que haya vendido tanto en época tan diferentes. Esto sitúa a Peret en una posición absolutamente diferente ante los demás. Chacho es muy bueno, tuvo éxito durante unos años, Ramonet también, Gato Pérez que sale precisamente cuando Peret está a punto de dejarlo para pasar unos años en la iglesia evangélica es buenísimo, pero son un poco otra cosa. A mí me parecía incluso que se fue un poco injusto con Peret intentando regatearle méritos, quizás porque la gente lo veía como de una época, el burriquito o Eurovisión. Pero yo creo que va mucho más allá.

¿Cómo surgió la rumba catalana?

Había algunos bares por allí por donde vivían ellos, por el barrio del Portal que ahora se llama el Raval, en los que se podía escuchar este tipo de músicos latinos que hacían cosas muy variadas. Y a principios de los 60 había muchos gitanos catalanes, como la familia de Peret, que se fueron a Argentina o a Uruguay a vender ropa por las casas. Esto es una cosa que nunca le gustó a Peret, porque se trataba de engañar a la gente, de hecho tiene una canción dedicada a su padre en la que explica esto, como su padre iba engañando a unos y a otros para levantar a la familia.

Todos estos músicos que se fueron se encontraron allí con una música y trajeron discos. Así, empezaron a improvisar en la calle de la Cera otros ritmos de palmas con estas influencias. De hecho, muchas de las canciones, como una de las primeras que graba en disco Peret La Bamba, son canciones que existen y que luego le cambian absolutamente la letra

Tras el boom de la rumba catalana ¿cómo se ha ido desarrollando durante los años?

La rumba más tipo pop se fue diversificando mucho. Se fue fusionando con otras músicas y ha ido variando muchísimo. Los últimos años quizás tienen tendencias salseras. En Barcelona hay varios barrios, en Gracia por ejemplo tira más a la salsa. Y luego hay muchísimos grupos que lo que hacen es fusión con ska. Ahora digamos que el panorama es muy variado y muy desglobalizado, porque antes era una cosa que se hacía en un barrio y se escuchaba en todo el mundo y hoy en día hay muchísima gente que está haciendo rumba. Por ejemplo, hace unos años en Francia los Gipsy Kings era un grupo de rumba catalana. Pero vamos que ha habido caminos para que este tipo de rumba se hiciera en cualquier parte y fusionada con cualquier cosa.

Por otro lado, este documental ya se proyectó en el Festival Dock of the bay y este año acude en la Sección a Muestra. No hay muchos festivales que centren en una temática tan específica ¿cómo ves la situación de los documentales musicales?

A mí me parecen increíbles, primero porque yo procuro solo hacer documentales de temáticas pop, básicamente son los únicos que me interesan. Entonces el documental musical tiene un desarrollo tremendo, posiblemente sea el documental preferido por la gente en estos momentos. Pero además es muy variado porque hay documentales desde la hiper producción de Scorsese, que hace una cosa maravillosa y monumental sobre George Harrison, hasta documentales como el que hace un par de años pasó por el Dock of the bay, ‘Quiero tener una ferretería en Andalucía’ sobre el paso de Joe Strummer por esta Comunidad española, que se realizó con nada, porque no tenía ni cámara para rodar, tenía que ir pidiendo a amigos.

El documental se estrenó en 2013. ¿En este tiempo cómo ha sido la acogida por parte del público y por parte del mundo de la rumba?

Desde el mundo de la rumba yo creo que les ha parecido muy bien, les ha gustado, a Peret en concreto le gustó mucho. En general, lo que me llega es que a la gente le sorprende mucho porque no conocía esta historia, que yo creía que era una historia más conocida, pero no. Además tiene el punto que a mí me gusta que es que los documentales sean un poco humorísticos y te expliquen una historia humana. Y en este sentido, la gente ha entendido muy bien que está para pasarlo muy bien con el documental.