El label vasco de calidad política
En tiempos de mandatarios bajo sospecha involucrados en tramas de corrupción, varios movimientos socio políticos emergentes en Euskadi ultiman un sello de calidad para acreditar el buen hacer de las agrupaciones políticas. La iniciativa pretende presionar a estos organismos representativos de los ciudadanos para que incorporen una serie de prácticas y actuaciones en su gestión que garanticen el cumplimiento de la legalidad así como ciertos principios éticos. Los impulsores de esta iniciativa, el partido M+J, Por un Mundo más Justo, Equo Euskadi y el Partido Animalista Pacma, intensificarán sus reuniones de cara a setiembre para poder presentar un portal web del distintivo de calidad política a finales del 2013.
Los aspirantes deberán cumplir una serie de requisitos básicos que ya están consensuados. Este sello exigiría como medida estrella el endeudamiento cero con las entidades financieras “para blindar la capacidad de los partidos políticos de cumplir aquellas promesas electorales que pudieran ir contra los intereses del poder financiero”. Para fomentar la financiación transparente se establecen otras condiciones como la declaración de las grandes aportaciones, la prohibición de aportaciones de entidades relacionadas con empresas, la publicación de cuentas o la obligatoriedad de trabajar con banca ética.
Otros requerimientos a ejecutar para obtener esa certificación son los referidos a la democracia interna de los partidos. Se reclamará la elección de todos los cargos mediante elecciones primarias, listas abiertas, votación de toda la afiliación previa publicidad de méritos de todas las candidaturas; limitación de mandato; publicidad de todas las retribuciones bajo cualquier concepto; rendición de cuentas de cada cargo anual y pública en Internet.
Auditoría de cuentas y de democracia interna
Otras medidas afectarían a las elecciones y los cargos del partido. Contemplan la renuncia a duplicidad de cargos; el compromiso de no incluir en listas a encausados o imputados o el compromiso a renunciar al cargo si se es encausado o imputado. Incluso pretenden que cada partido dedique un espacio digital para cada cargo que publique méritos, mandato, retribuciones y rendición de cuentas anual. “Si los partidos cumplen con estas medidas será muy difícil que se repitan casos como los actuales, en que un grupo de poder del PP, de unas cincuenta personas tan solo, controle toda la acción del Gobierno de todo un país, es demencial”, denuncia el impulsor del proyecto, Alejandro Plans, de M+J.
Por último otras afectarán a la relación con fundaciones y asociaciones de modo cuantitativo y cualitativo.
Los promotores de esta iniciativa tienen aún pendiente de definir el órgano que otorgará el sello de calidad. “De momento estudiamos las opciones. Podíamos recurrir como lo hacen los organismos no gubernamentales a auditorías externas o proponer un órgano de control y seguimiento mixto, el que también participen los ciudadanos aunque somos conscientes de que esta última opción es muy difícil de articular”, aclara Alejandro Plans, de M+J.
Una vez tengan cerrada la normativa a cumplir, los responsables del proyecto lo presentarán a todos los partidos del arco parlamentario y demás fuerzas políticas para proponerles como candidatos. “Siempre es más fácil demostrar que sí se cumple. Así fomentamos una actitud proactiva entre todos los profesionales de la política. Si nos autoimponemos unas limitaciones y un buen hacer que se interioricen y se conviertan en hábitos, habremos ganado mucho”, concluye Plans.
