Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La protección a los parados vascos se desploma: solo uno de cada tres tiene cobertura

El Servicio Vasco de Empleo-Lanbide tiene registrados más de 171.000 parados.

Eduardo Azumendi

La protección económica a los desempleados se encuentra bajo mínimos en Euskadi. Así, en estos momentos solo uno de cada tres parados vascos tiene cobertura. Bien mediante la prestación contributiva, la Renta Activa de Inserción (RAE) y el subsidio. En conjunto, el número de beneficiarios de algún tipo de prestación se situó en marzo en 57.103 personas. Eso supone un descenso de casi siete puntos con relación al mismo mes de 2014. La razón es evidente: la duración de la crisis está erosionando los derechos. Las personas que han agotado la prestación precisan de mucho tiempo para volver a tener derecho, ya que no logran acceder al mercado de trabajo.

La tasa de cobertura mide el número de parados que cobran la prestación en relación con el volumen total de desocupados inscritos en las listas del paro que han tenido un empleo anterior, lo que les da derecho a la ayuda. Es decir, que el Gobierno central (que es el responsable de la prestación) no cubre de ninguna manera a los que no han logrado aún su primer empleo. Esta circunstancia le permite inflar la tasa de cobertura de manera artificial, de manera que la relación de parados que cobran prestación sobre el total de desemplados es mucho más baja de lo que se dice oficialmente.

La Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística corrobora los datos con los que trabaja Lanbide. En esta encuesta se pregunta a los ciudadanos si están apuntados al paro y si cobran algo. El 33,4% de los desempleados registrados cobra algo. Un porcentaje similar al que ofrecen los técnicos de Lanbide, pero que difiere del ofrecido por el Gobierno central que tiende a redondear entre el 40y el 50% el número de parados que cuentan con ayuda.

Euskadi fue la última comunidad en entrar en crisis y le está costando salir de ella. El problema es que la recuperación llega de un reparto “extraño” del trabajo, apuntan desde Lanbide. “Lo que crece es el trabajo de muy baja calidad, infraempleo en cuanto a horas. Se trabaja por poco dinero, es empleo muy barato”. Un dato corrobora esta realidad: el índice de subempleo, que pone en relación las personas que trabajan a tiempo parcial, pero de forma involuntaria, sobre el total de ocupados. En Euskadi, esa tasa es del 12,5%, superior a la del resto de España y de Europa, que ronda el 6%. Más de 100.000 trabajadores de los 850.000 ocupados que hay en Euskadi están acogidos a este tipo de trabajo. Un empleo que no da para vivir. Lo que se conoce como trabajadores pobres.

Etiquetas
stats