Esta semana en Vitoria toca ponerse la camiseta de aficionado al jazz. Llega el festival internacional, en su 37ª edición, y la ciudad entera se inunda de conciertos, y surgen de la nada los fans de la música de la improvisación. Durante una semana (este año, gracias a los recortes, serán solo cinco días, de martes a sábado), florece la ‘jazzmanía’. No está mal, pero es una lástima que muchos guarden en un armario esa camiseta y ese espíritu durante 360 días.
Yendo al grano, lo esencial del Festival de Jazz de Vitoria se mantiene intacto. De hecho, algunos critican (no sin razón) la falta de riesgo del programa, el clasicismo y la reiteración en los nombres que llegan al pabellón de Mendizorroza, la sede donde actúan los grandes artistas. El caso es que se ha optado por lo seguro. Paco Lucía y Chick Corea cerrarán el certamen el sábado, con el cartel de ‘No hay billetes’ asegurado. Es una fórmula que ya ha funcionado en anteriores ediciones, y no falla. Ese será el taquillazo del festival.
Martes 16
El góspel sigue teniendo un hueco, en el comienzo del certamen, que arranca con el coro Los Angeles Crenshaw, dirigido por Iris Stevenson, quien inspiró la película Sister Act 2, protagonizada por Whoopi Goldberg. Lo que cabe esperar, ya se sabe: grandes voces, ambiente espiritual y acompañamiento de palmas incesante.
Miércoles 17
El segundo día llega la ‘confirmación de alternativa’, en términos taurinos, para un joven trompetista que el año pasado triunfó en el ciclo Jazz del Siglo XXI, en el Principal. Se llama Ibrahim Maalouf, y le caracteriza el buen gusto y la delicadeza con que trata cada tema (ver vídeo). La segunda parte de la velada estará protagonizada por las cuerdas del sexteto del guitarrista Bill Frisell.
Jueves 18
El ecuador del festival tendrá en Mendizorroza a Jacky Terrasson con un grupo de amigos que promete un repertorio variado, ecléctico, típico de este músico nacido en Alemania de padre francés y madre americana. Le sucederá Melody Gardot, con su estilo peculiar, fronterizo entre el blues, el jazz, y creyente de la musicoterapia. De hecho, ella empezó su carrera musical empujada por unos problemas de salud a raíz de un accidente.
Viernes 19
Los cruces entre artistas que visitan Mendizorroza son frecuentes. Por ejemplo, Jacky Terrasson grabó en 2001 un disco con Tom Harrell, quien abrirá la sesión del viernes con su quinteto. Este trompetista y compositor cuenta con una larga carrera y una intensa discografía con más de 30 álbumes, incluidas innumerables colaboraciones con los músicos de jazz más activos del momento. Tras él, se subirá al escenario de Mendizorroza un músico con algo más que un apellido ilustre. Brandford Marsalis, hermano mayor de Wynton, tiene por sí solo una carrera sólida, en la que también ha combinado estilos y acompañantes varios sin perder nunca la ‘etiqueta Marsalis’ de calidad. A Vitoria acude en formato de cuarteto.
Sábado 20
El plato fuerte del festival es el doblete –y lo que se tercie- de Chick Corea y Paco de Lucía. Ambos se encontraron en el mismo escenario en 2001 y volverán a repetir en el último día de este año. Primero el pianista con su nuevo grupo The Vigil, luego el flamenco de la ‘troupe’ del maestro gaditano y para rematar, la fusión de todos ellos.
Más allá del oficialismo, existe un mundo por descubrir. Para los que aman el jazz sin necesidad de que también sea un acto social, está el Teatro Principal, y sus jóvenes valores: la conexión local-internacional de Javier Colina y Kirk Lightsey (martes), el pianista Craig Taborn en solitario (miércoles), Ben Williams Sound Effect, una mezcla armoniosa de jazz, rap o funk (jueves), el trío del pianista Francesco Tristano (viernes) y el batería Antonio Sánchez & Migration, en el cierre del sábado.
Pero aún hay más. De hecho, la popularización del festival se debe a que los conciertos se desperdigan por toda la ciudad. En el hotel NH estarán Cyrus Chesnut y Ray Gelato, en salas distintas pero sin duda ambos con mucho nombre a sus espaldas.
En la calle, en sesiones de mediodía (13h) y de tarde (19:30h) está la To Be Continued Brass Band, por supuesto llegados de Nueva Orleans y con el sabor callejero que nunca falta en la cita vitoriana. Anarquía, mucho metal, alegría en el cuerpo… todo eso ofrecen.
Y luego están los pubs que se hacen hueco para programar jazz estos días. Está el tradicional The Man in the Moon, con un grupo cada día (Arturo Blasco el 17, The Song el 18, Steamboat Jazz Band el 19 y Makala el 20). El Dublín tendrá a esta última el viernes y a Igu Allnighter el sábado. El saxofonista Quique Guzmán ocupará el World Music del 15 al 19, Iñaki Arakistain estará enfrente, en el Molly Malone. Arturo Blasco también estará presente en el Café Hungaria y el pub O’Connors tendrá a Behind el sábado.
Pero además de estos locales habrá otros, fuera del circuito y el cartel oficial, que también se sumarán a la ola de jazz de esta semana. Será por oferta.
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