El Gobierno Foral promete agilizar la realización de nuevas exhumaciones, como exigen las familias

La consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales del Gobierno de Navarra, Ana Ollo, ha mantenido un encuentro con el secretario general de la Asociación de Ciencias Aranzadi, Juantxo Aguirre, a quien trasladó la intención del Ejecutivo foral de trabajar para que se agilicen las exhumaciones de fosas de personas desaparecidas, víctimas de la represión franquista. Este es uno de los compromisos incluidos en el acuerdo programático del nuevo Ejecutivo, así como una de las reclamaciones insistentes de los colectivos vinculados a la memoria histórica.

Esta reunión responde al deseo de la consejera Ollo de realizar una primera toma de contacto que le permita conocer de primera mano el trabajo de la asociación y definir líneas de actuación que permitan empezar a acometer nuevas exhumaciones lo más pronto posible.

Como se sabe, en 2012, el Gobierno de Navarra aprobó un protocolo de exhumaciones con el fin de dotar de todas las garantías posibles a los procesos de este tipo que se desarrollen en la Comunidad foral, de modo que no puedan realizarse en Navarra exhumaciones sin control.

Posteriormente, la Ley Foral 33/2013 de Memoria Histórica aprobada el 26 de noviembre de 2013, obliga al Gobierno de Navarra a seguir este protocolo y a financiar todos los cargos que se originen de las exhumaciones, incluidos los de localización de fosas, exhumación, traslado de restos al laboratorio, análisis e identificación y sepultura.

Desde el año 2000 la Sociedad de Ciencias Aranzadi ha actuado, en colaboración con distintas asociaciones de Memoria Histórica, en más de un centenar de fosas. Ha intervenido en el cien por cien de las exhumaciones realizadas en Navarra y la Comunidad Autónoma Vasca, pero también en otros territorios del Estado, contribuyendo tanto en los procesos de exhumación de fosas comunes, como en el análisis de los restos, ha informado el Gobierno foral en una nota.

El equipo de trabajo de exhumación de fosas está formado por profesionales de la medicina, antropología física, arqueólogos e historiadores de la asociación.

El proceso

Los promotores de la exhumación son principalmente los familiares. El trabajo comienza con el informante, que tiene conocimiento de la ubicación de la fosa. Realizada la petición, se pone en marcha el equipo de trabajo formado por profesionales de diferentes disciplinas.

Se excava el terreno y se desentierran los restos, que se trasladan a un laboratorio donde se estudian, investigan e identifican. Finalmente se realiza un homenaje final a las víctimas de la guerra por parte de las familias e instituciones.