La Guardia Civil desarticula en la Ribera un taller clandestino dedicado a la reparación de vehículos

La Guardia Civil de Navarra, en el marco de la operación Lacarra, ha desarticula en la Ribera un taller clandestino dedicado a la reparación de vehículos y ha detenido a dos varones, de 36 y 42 años, como presuntos autores de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente (vertidos de residuos).

La investigación se inició a raíz de la recepción de una denuncia en la Guardia Civil donde se comunicaba la inhalación de gases tóxicos provenientes de unos residuos vertidos por parte de un vecino a la red de saneamiento pública, en una localidad de la Ribera de Navarra.

En dicha denuncia se informaba de que desde hacía años estaban en esa situación, teniendo incluso que ir recientemente al centro de salud por haber inhalado aire tóxico de algún producto químico, provocándoles lesiones de pronóstico leve, ha informado la Guardia Civil en una nota.

Conocidos los hechos, el equipo de Seprona de la Guardia Civil de Navarra inició una investigación para esclarecer lo sucedido. Los agentes se personaron en el domicilio de la persona denunciante y constataron cómo en el patio de uno de sus vecinos se encontraban varios vehículos, herramienta y maquinaria, lo que hizo sospechar de la posibilidad de la existencia de un taller clandestino en ese domicilio.

Continuando con la investigación, se logró determinar que uno de los detenidos realizaba reparaciones de vehículos en su domicilio, con ayuda de una persona que vivía con él. Ambos, cobraban en metálico sin aportar facturas ni garantías legales. Para ello, adquirían piezas de segunda mano en desguaces o les decía a sus 'clientes' el tipo de piezas que necesitaba para que las comprasen.

Durante el registro domiciliario llevado a cabo, se incautaron multitud de herramientas, maquinaria, disolventes y pinturas utilizadas por el 'taller clandestino' para los arreglos.

Estas personas no estaban dadas de alta en la Seguridad Social como trabajadoras ni como productoras de residuos, realizando las operaciones de mantenimiento y arreglos en el patio de su vivienda, “sin tener ningún control sobre los restos de ámbito tóxico que se generan en estas situaciones, tanto sólidos (restos de piezas y partes de los vehículos), líquidos (aceites, carburantes...) como gaseosos (vapores de pinturas en spray, disolventes, cargas de aire acondicionado...), con el consiguiente perjuicio para las personas cercanas y el medio ambiente”.

Por todo lo anterior, se ha procedido a formular las denuncias correspondientes en materia administrativa ante Hacienda y la Seguridad Social, además de ser detenidos como presuntos autores de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente (vertidos de residuos).