Serapio Esparza, arquitecto que desarrolló el II Ensanche, dará nombre a la plaza de Conde Rodezno

Serapio Esparza, arquitecto que desarrolló el II Ensanche de Pamplona, dará nombre a la plaza de Conde Rodezno mientras que el arquitecto que impulsó el nacimiento del I Ensanche, Julián Arteaga, será reconocido con la calle actual de Hermanos Imaz.

Así lo han explicado en rueda de prensa el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, y el concejal delegado de Seguridad Ciudadana y Convivencia, Aritz Romeo, quienes han informado de que otros cambios de denominación que también se realizarán próximamente serán dar un nuevo nombre al centro cultural ubicado en la actual plaza de Conde Rodezno y recordar la figura de Maravillas Lamberto, la 'florecita de Larraga', con un espacio en el nuevo barrio de Lezkairu.

Asimismo, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, han expuesto, se está trabajando para que en un futuro próximo sean trasladado del edificio de Conde de Rodezno los restos de los generales Mola y Sanjurjo y toda la simbología franquista.

Según han detallado, el Ayuntamiento de Pamplona adoptará estos cambios teniendo en cuenta el acuerdo de gobierno firmado por las cuatro fuerzas que sustentan el gobierno municipal y que en el artículo 42 recoge “eliminar la simbología franquista, recuperación de la Memoria histórica y reconocimiento y reparación de las víctimas olvidadas, en cumplimiento de la legislación vigente en materia de Memoria Histórica; eliminar los vestigios toponímicos franquista en nuestras calles, incluyendo la actualmente llamada Plaza de Conde Rodezno”.

Con las nuevas denominaciones, han comentado, se ha querido reconocer a dos figuras importantes en la historia de Pamplona, los dos arquitectos municipales Julián Arteaga y Serapio Esparza que diseñaron el Primer y Segundo Ensanche respectivamente, y que pasarán a ver reconocida su figura con un espacio en la zona que desarrolló cada uno de ellos.

Asimismo, han dicho, se cumplirá la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura, conocida como Ley de Memoria Histórica. Los nuevos nombres serán aprobados próximamente por un decreto de Alcaldía tras ser avalados por la Junta de Gobierno Local y ser informados el resto de grupos municipales.

AUTOR TAMBIÉN DE EDIFICIOS EN LA PLAZA CONDE RODEZNO

El arquitecto municipal Serapio Esparza fue homenajeado el pasado 8 de septiembre, día del Privilegio de la Unión, ya que el Consistorio reconoció al II Ensanche en la conmemoración del centenario del derribo de una parte de las murallas, un hecho que permitió el desarrollo del nuevo barrio.

En concreto se derribaron las murallas en el frente sudeste, tras largas negociaciones con los militares, permitiendo así el crecimiento de la ciudad ocupando la meseta hasta el límite marcado por la Ciudadela y por los desniveles del este y del sur.

Serapio Esparza redactó un proyecto, cuestionado en sus inicios ya que fue tachado de inviable, inspirado en el Ensanche de Barcelona diseñado por Ildefonso Cerdá unos años antes. Dibujó 99 manzanas prácticamente cuadradas que se conectaban mediante calles rectas, como un damero, teniendo como ejes principales la avenida de Carlos III, la carretera de Francia (actual avenida de la Baja Navarra) y la carretera de Zaragoza.

Las calles varían su anchura entre 15 y 30 metros, según su ubicación, y en las viviendas se buscó que contaran con luz natural. Todo ello quedaba cerrado con parques al sur (Conde de Rodezno) y al este (Media Luna) y con una conexión directa con el Casco Antiguo y con el I Ensanche. Supuso un diseño innovador en el desarrollo de la trama urbana de la ciudad, ha informado el Ayuntamiento.

Serapio Esparza San Julián (Pamplona, 1880-1968) dejó numerosas obras en la ciudad además del II Ensanche: algunos edificios en la plaza a la que ahora dará nombre, el Colegio Público Vázquez de Mella, la iglesia del Convento de las Josefinas, el Centro de Formación de los Salesianos en la calle Ararla o la Basílica de San Ignacio. Asimismo, es autor del monolito ubicado en el pueblo de Amaiur. Serapio Esparza llegó al puesto de arquitecto municipal en 1915 tras la jubilación de Julián Arteaga.

Con la denominación de Plaza Serapio Esparza desaparecerá del callejero de Pamplona la de Conde Rodezno, “nombre del primer ministro de Justicia de Franco y al que se le imputan más de cincuenta mil sentencias de muerte”.

LOS PRIMEROS PASOS PARA LA NUEVA CIUDAD

Julián Arteaga contará con una calle en el I Ensanche, zona que diseño como arquitecto municipal. Pamplona había llegado a finales del siglo XIX limitada en su desarrollo por las murallas que rodeaban la ciudad y con una población que crecía constantemente. Tras el acuerdo alcanzado con los militares se pudo construir en la zona cercana a la Ciudadela, tras derribarse los baluartes de San Antón y de la Victoria en 1891.

El espacio del proyecto final contaba con unas dimensiones mucho menores que las que tendría el II Ensanche tras permitirse el derribo de parte de la muralla. En este caso fueron seis manzanas con cincuenta y un solares en la zona que ahora ocupan calles como Padre Moret, Sandoval o Hermanos Imaz. En ellas se construyeron nuevos edificios para albergar viviendas.

Julián Arteaga Sáenz (Arbeiza 1850-Pamplona 1921), desarrolló su labor de arquitecto municipal desde 1988, cuando llegó proveniente de Tudela en donde había ocupado el mismo puesto, hasta su jubilación en 1915. Estudió la carrera en la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid e impartió clases en la Escuela de Artes y Oficios de Pamplona.

Además de planes urbanísticos que incluyeron proyectos de saneamiento o de jardines y que impulsaron la modernización de la ciudad, también desarrolló diseños para edificios como el Palacio de Justicia (actual Parlamento de Navarra), las Escuelas de San Francisco, el Pasaje del Seminario y varios edificios modernistas.

Según ha añadido el Ayuntamiento, “los hermanos Imaz que han dado nombre a la calle pertenecieron a una familia de militares”. “Uno de ellos murió en la guerra de Cuba y 4 lucharon en la guerra civil en el bando nacional. Dos de ellos murieron y otros dos continuaron su carrera militar durante el franquismo”.

MARAVILLAS LAMBERTO

Maravillas Lamberto (Larraga 1922 - Larraga 1936) fue asesinada en su localidad natal en agosto de 1936 cuando tenía 14 años. Vivía en Larraga con su padre, su madre y sus dos hermanos. Su padre, Vicente Lamberto, campesino de la zona, fue militante de la Unión General de Trabajadores durante la Segunda República.

Al inicio de la Guerra Civil, en agosto, Vicente Lamberto fue detenido y trasladado al ayuntamiento para ser interrogado, acusado de sindicalista. Maravillas pidió acompañar a su padre, tal y como cuentan sus familiares, sabiendo que lo llevaban para matarlo. Ya en el ayuntamiento, su padre fue encerrado en la cárcel y la menor violada. Ambos, posteriormente, fueron asesinados, ha expuesto el Ayuntamiento.