“En VW se valoran más las relaciones laborales que las leyes del Gobierno”

José Luis Manías es el presidente del comité de empresa más grande de Navarra, el de Volkswagen. El sector del automóvil ha sufrido mucho la crisis y, sin embargo, en la factoría navarra no se han perdido puestos de trabajo fijos de la plantilla. Manías considera que la clave del éxito de la fábrica en la Comunidad Foral son las relaciones entre el comité y la empresa, y el hecho de que las dos partes consideren que son lo más importante para el futuro de la planta automovilística.

El último acuerdo al que llegó el comité con la empresa eran las prejubilaciones dentro del plan de rejuvenecimiento de la plantilla. ¿Ya se ha puesto en marcha?

Se está dando información a los 133 compañeros que están incluidos en este primer proceso: se les está citando a personal para informarse sobre el importe de la baja voluntaria, la tributación etc. Tienen una primera valoración económica para que en estos días de vacaciones se lo piensen.

¿Cómo lo ve la plantilla?

En este momento estamos viendo cómo hay compañeros que tienen dudas, la más importante no es la económica porque el acuerdo está bien en cuanto a cantidades. Sino con la fórmula que se aplicaba y ahora ha cambiado. Tienen algún recelo de cómo se van a quedar después. Nosotros queremos que se les informe desde la seguridad social y hacienda para ver cómo les va a afectar, la pensión que van a tener… Desde el comité también les informamos.

¿Es fácil negociar con una empresa multinacional?

Tenemos una carta de relaciones laborales que pone al mismo nivel de objetivos los objetivos de la empresa (productividad, rentabilidad…) y la protección del empleo y los derechos sociales. Eso entra dentro de la filosofía corporativa que queda reflejada en los acuerdos del comité mundial, se impone de arriba abajo y se aplica en todos los centros. Ahí pensamos que estamos bien porque hemos podido acordar con la dirección del consorcio lo importante que es para nosotros la protección de la plantilla, la protección del empleo, y que tiene que ir combinada con que la productividad y la competitividad.

¿Sienten que van un paso por delante de otras empresas navarras en la negociación de las condiciones laborales?

La industria del automóvil, más que ir un paso por delante, es una industria muy competitiva. En muchas de las innovaciones respecto a los pactos a los que llegan los agentes sociales con las direcciones, siempre hemos sido pioneros: con la aplicación de los pedidos de flexibilidad, adaptación a circunstancias muy cambiantes, aplicación de bolsas de horas, o la aplicación de pluses ligados a la situación de la compañía.

Un sector competitivo, pero que también ha sufrido la crisis.

Hemos sufrido la crisis como nadie porque estamos en niveles de ventas de hace 20 años, pero hemos podido adaptarnos con los mecanismos de flexibilidad interna y eso nos ha permitido salvaguardar el empleo en el sector. También hemos podido poner en marcha bolsas de horas para atender a picos de producción, o crear pluses vinculados con la marcha de la empresa.

En Volkswagen se han aplicado cuestiones laborales desde hace años que en España están empezando a aplicarse ahora.

Nosotros por ejemplo en Volkswagen Navarra tenemos un plus que se llama pago de objetivos, que viene ligado a la productividad, a la calidad y al beneficio de la compañía, tenemos un pago por rendimiento individual basado en una serie de conceptos que se evalúa anualmente y este último convenio hemos puesto un pago por volumen. Si superamos un cierto número de producción tenemos un pago en escala. Por ejemplo, diferente a las mensualidades ordinarias.

Los convenios de VW, ¿sirven modelo para empresas más pequeñas del tejido industrial navarro?

A nosotros nos gustaría servir de modelo, aunque en este caso, los modelos los juzga quien los trata de imitar. Nosotros sí pensamos que las empresas donde los comités tienen más fuerza pueden negociar mejores condiciones para las plantillas. Ojalá pudieran marcarse esas tendencias en la pequeña y mediana empresa o incluso en las que circundan como proveedores a VW Navarra.

El contar con una plantilla de más de 4.000 trabajadores da mucha fuerza a la hora de negociar los convenios.

A nivel global VW Navarra tiene una facilidad mayor para alcanzar acuerdos a largo plazo de una forma más sencilla, no solo por el número de empleados. Quizá, y lo decimos muchas veces, hemos sido capaces de defender el valor de las relaciones entre el comité y la empresa por encima de las normas que a nivel estatal se han dictado para balancear el peso en este caso hacia el lado de los empresarios, que es lo que ha hecho la reforma laboral.

¿Se aplica en VW la reforma laboral?

El primer capítulo que nosotros hemos puesto en nuestro convenio es la no aplicación de la reforma laboral de 2012. Es una gran empresa insertada en la patronal española pero que reconoce que el valor de las relaciones laborales está por encima de las leyes que dicta el gobierno.

¿Cuántos trabajadores componen la plantilla actual de Volkswagen?

Ahora estamos en un momento con 95 compañeros eventuales para reforzar el lanzamiento del polo GP que empezó de manera exclusiva a partir de mayo y unos 130 compañeros sustituyendo jornadas reducidas, aparte de eso no hay eventualidad. Ojalá tengamos un pequeño pico de producción y podamos poner en marcha los desplazamientos de pausa. Es una idea, un rumor que había hace unos días en los talleres, que quizá había un pedido extra, pero está sin confirmar. La plantilla está entorno a los 4.200 trabajadores que llega a los 4.500 en momentos puntuales como este, en el que hay trabajadores eventuales para apoyar el lanzamiento.

¿Tiene el comité miedo a la deslocalización?

Hace poco veía desde la distancia un artículo de prensa en el que varios expertos auguraban allá por 2008 que Volkswagen se iba a deslocalizar porque era un sector maduro. Ahora lo veo y me río de las opiniones de aquellos expertos que muchas veces, lo decimos con cierta sorna, lo único que conocen de Volkswagen Navarra es que empieza por V. Nosotros más que pensar en la deslocalización pensamos en los puntos fuertes que tiene esta empresa que nos hace defendernos de cualquier plan, inclusive el de la deslocalización. Más que tener miedo estamos seguros de que los pilares que sostienen a VW Navarra aquí hacen que sea un sector asentado y maduro. Yo creo que VW tiene un gran futuro en Navarra.

¿En qué se apoya para augurar ese buen futuro para la empresa en la Comunidad Foral?

Lo cierto es que hay planes que hablan de 700 millones previstos para invertir aquí, algunas cifras hablan de que pueden ser incluso 800 millones los que se van a invertir para el lanzamiento del nuevo polo en 2017. Ese montante de inversiones que se van a ejecutar aquí, se ejecutan para el lanzamiento de un coche, cuya vida media se estima en 7 u 8 años, con lo que podemos extrapolar el lanzamiento 2017 hasta el 2025. Diríamos que no solo no tenemos miedo. Volkswagen produce el modelo polo para Europa en exclusividad, junto a otras fábricas que lo hacen para el resto del mundo, y por eso decimos que el futuro es halagüeño. Hay que mirar la calidad, la productividad y los costes con los que fabricamos coches aquí, que es lo que mantiene al sector vivo. Lo último que sabemos es que el sector del automóvil es el que ha tirado de las exportaciones en España y junto con el turismo los dos pilares fundamentales de la económica. Yo le auguro un gran futuro a VW Navarra, y espero que siga siendo la piedra angular de la economía Navarra.