Raquel Romero, de bloquear la investidura de Andreu a consejera en el Gobierno de La Rioja

Las ambiciones de la única diputada de Podemos en La Rioja de ser consejera en el Gobierno de coalición con el PSOE han cristalizado. La presidenta socialista, Concha Andreu, ha designado consejera de Participación, Cooperación y Derechos Humanos a la mujer que tumbó su primera investidura aludiendo a la fábula de “La zorra y el cabrón” y tras romper la coalición con IU y a la que la famélica organización morada de La Rioja no había propuesto para el cargo por dos ocasiones, al proponer a Nazaret Martín -que renunció por las fuertes presiones sufridas en las últimas horas- y a Amalia Revuelta. Con Romero, se da por seguro que darán el salto al Ejecutivo o al Parlamento varios de sus colaboradores procedentes de Castilla-La Mancha y que han protagonizado las negociaciones políticas en la región.

La inclusión de Romero en el primer gabinete de izquierdas de La Rioja en 24 años supone el final de varias jornadas de tensión política en un partido abierto en canal y que ya en julio sorprendió al PSOE al exigir tres Consejerías y hasta una vicepresidencia a cambio de un sólo escaño. La pasada semana, antes de firmar el acuerdo con el PSOE y con IU y en previsión de poder entrar al Gobierno, el “equipo técnico” que controla el partido a falta de organización más sólida propuso a Martín, asesora en Logroño, como su consejera y lo comunicó a Andreu.

Pero Romero no acató esa propuesta, denunció que se había hecho sin su asentimiento y se postuló ella misma para el puesto. Se lo llegó a trasladar en persona a la presidenta en el Parlamento. El partido anunció públicamente el nombre de Martín el sábado pasado, pero ello no sólo no frenó a la diputada sino que las presiones internas crecieron exponencialmente contra Martín. Ello llevó a su renuncia a última hora del miércoles por motivos personales y a que el partido propusiera a Amalia Revuelta en su lugar.

El entorno de Romero, apoyada principalmente por los asesores castellanomanchegos, ha emitido una nota en nombre de “Podemos La Rioja” en la que se califica de “ilegítima” cualquier propuesta del “equipo técnico” y han acusado al partido de vetar la presencia en sus reuniones de la diputada. Este sector cuestiona también el papel al frente del partido de Kiko Garrido, pareja de Martín, y que iba a entrar al Ejecutivo como 'número dos' en caso de que se hubiese mantenido la propuesta inicial del partido. La palabra “nepotismo” ha sido muy repetida. El partido ha respondido con una nota en la que indica que sólo son válidas las comunicaciones emitidas desde las cuentas oficiales de Podemos.

Ahora está en el aire si Romero compatibilizará el Gobierno con el Parlamento. Legalmente es posible pero lo impiden los estatutos de Podemos y, en la práctica, ser diputado único en una Cámara supone una presencia en todos los debates y actividad poco viable para un miembro del Gobierno. Además, podría darse el caso de que en plenos de control Romero interviniera como representante de Podemos primero y después como consejera dando la respuesta. Algunas fuentes apuntan a que se trata de una situación temporal hasta que la organización de Podemos se estabilice y se encuentre el perfil de otra mujer para el cargo de consejera -es una exigencia socialista para que el gabinete sea paritario-. Dejar el escaño no parece una opción, ya que el siguiente en la lista electoral es Garrido.