En Bilbao necesitamos definitivamente otra seguridad. Una seguridad basada en la prevención y no en la represión, una seguridad proactiva y sostenible. A veces desde el ámbito político relativizamos sobre la delincuencia, buscando argumentos en las superestructuras y quizás nos confundimos en la complejidad del problema. Los fenómenos de Robin Hood, la pirata Anne Bonny, Giuliano el bandolero comunista, o los más cercanos como Makinavaja, son parte de un imaginario que hace decir al escritor Laurent Maréchaux: “Nuestro mundo se está muriendo por no tener más forajidos de gran corazón”. Lucía y Rafael, como 'Urren'y otras más, opinarían de manera distinta. Tendrían razón.
Decía Hannah Arendt que “la práctica de la violencia, como toda acción, cambia el mundo, pero el cambio más probable es un mundo más violento”. No queremos un mundo más violento, pretendemos una convivencia digna que proteja a todas las personas para conseguir esa sociedad más justa, sin que entrañe la laxitud frente al crimen.
¿Qué soluciones proponemos frente a la criminalidad? Desde luego que más policía es insuficiente. Convertir la ciudad en una especie de cárcel, con cámaras por todas partes y agentes patrullando no es la solución. Sabemos que en cualquier cárcel se comenten delitos, por tanto, “la mano dura o el control total” es un eslogan falso y fracasado.
Creemos que otra seguridad es posible, sólo hay que ver las experiencias exitosas sobre seguridad local compartidas por el Centro Internacional para la Prevención de la Criminalidad (CIPC) o el Foro Europeo para la Seguridad Urbana (FEPSU). Es una pena que las autoridades del Partido Nacionalista Vasco no quisieran participar en el CIPC, o que se salieran del FEPSU, pero hemos de enmendar sus errores. Tenemos que convertir esta crisis seguritaria en una buena ocasión para lograr una protección efectiva y razonable para nuestra ciudad y su ciudadanía.
Por eso nos hemos implicado plenamente en el “Pacto por la Seguridad” ofrecido por el alcalde Aburto, aunque nos encontremos en la fase final del mandato y reconociendo que han sido incapaces de elaborar y desarrollar su modelo de seguridad. Somos conscientes del riesgo de manipulación partidista de este tema, unos por su incompetencia, para evitar críticas, otros para conseguir votos manipulando vísceras, pero desde UdalBerri trataremos de aportar sensatez y sobre todo, propuestas concretas.
Por todo ello consideramos que el documento del Pacto de Seguridad presentado por el Gobierno es claramente insuficiente y está absolutamente desorientado, además de ignorar nuevamente la participación ciudadana por excluir en su elaboración y desarrollo a los movimientos vecinales y asociativos. En cambio, por nuestra parte nos apoyamos en la Seguridad Urbana, en las técnicas de la Eco-Seguridad, en una seguridad integrada con las políticas sociales y por supuesto participada socialmente, intentando lograr una visión sostenible de la seguridad urbana, basada en el equilibrio entre prevención, sanción y cohesión social.
*Carmen Muñoz es portavoz de UdalBerri - Bilbao en Común, grupo municipal del Ayuntamiento de Bilbao cuya coalición está formada por Podemos, Equo Berdeak y Ezker Anitza- IU
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