En este blog publicamos los artículos y cartas más interesantes y relevantes que nos envíen nuestros socios. Si eres socio/a puedes enviar tu opinión desde aquí. Consulta nuestras normas y recomendaciones para participar.
Inmigración y refugio, sí
Existen muchas razones para que España acoja personas inmigrantes y refugiadas de buen grado:
1. Por humanidad.- No olvidemos que estas personas provienen de países empobrecidos o en guerra, que su empobrecimiento actual está agravado a veces por las consecuencias del cambio climático (sequías, inundaciones,…), que sus territorios sufrieron un empobrecimiento pasado, debido a malos comportamientos del colonialismo en algunas ocasiones (expolios, esclavismo,..) y que muchas veces su precariedad radica en guerras alimentadas por la industria armamentista occidental.
2. Por legalidad.- Sabemos, por el artículo 13 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que “toda persona tiene derecho a circular libremente y a establecer su residencia en el territorio de un Estado”, también que “tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar” y que España suscribió esta Declaración que inspira la Constitución Española. Por supuesto, la legislación de extranjería vigente debe hacer efectivo este derecho humano con la mayor eficacia posible; debemos exigir pasajes seguros para inmigrantes y refugiados para evitar el alto riesgo de muerte cuando intentan llegar a nuestras costas. Es contradictorio que mueran personas intentando prosperar en la vida habiendo ofertas de trabajo sin cubrir en los países de destino.
3. Por demografía.- España es el segundo país de la Unión Europea con la tasa de natalidad más baja (1,19 hijos por mujer) y el cuarto con la tasa de envejecimiento más alta: el 20,1 % de la población española es mayor de 65 años. Es por esto que el Banco de España, en su último Informe Anual, señala que España tendrá que contar con una población inmigrante de unos 25 millones de personas en 2053, para asegurar el estado de bienestar y evitar los desajustes del mercado de trabajo.
4. Por razones económicas.- Se sabe que la aportación al crecimiento de la riqueza nacional en España (PIB) por parte de la población inmigrante ha sido, aproximadamente, de un 30 % en la última década. El desarrollo de grandes naciones ( Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia, Suiza,…) en la última centuria hubiera sido mucho menor sin el trabajo de la población inmigrante que recibieron. Además, las remesas de esta población a sus países de origen contribuye a su desarrollo. También la llegada de inmigrantes genera oportunidades: integración, alojamiento, alimentación, educación, sanidad, entretenimiento, etc…
5. Por historia.- Sabemos que tras la Guerra Civil, la población española exiliada o emigrada fue generalmente bien acogida en América y Europa.
6. Por razones interculturales.- El encuentro entre culturas de diversos países es deseable porque todas ellas tienen aspectos positivos y negativos, pudiendo evolucionar todas ellas hacia el reconocimiento mutuo y el intercambio de lo bueno y lo bello.
En fin, Europa debe incrementar, por humanidad y ajuste de flujos migratorios, los fondos de cooperación y ayuda al desarrollo para favorecer a los países más empobrecidos de África. También debe intervenir en la prevención allí de conflictos bélicos que, además de sufrimiento, aumentan la precariedad de la población.
Sobre este blog
En este blog publicamos los artículos y cartas más interesantes y relevantes que nos envíen nuestros socios. Si eres socio/a puedes enviar tu opinión desde aquí. Consulta nuestras normas y recomendaciones para participar.
0