Ankara rechaza que los ciudadanos alemanes corran riesgo en Turquía

Ankara condenó hoy “firmemente” la afirmación de Berlín de que los ciudadanos alemanes no pueden sentirse seguros en Turquía y de que las empresas germanas corren riesgos por la ausencia de seguridad jurídica.

“Condenamos firmemente las declaraciones de que los ciudadanos alemanes no estén seguros, que las empresas alemanas estén en riesgo”, dijo el portavoz de la Presidencia turca, Ibrahim Kalin, en rueda de prensa transmitida en directo por la emisora NTV.

“Hemos expresado que los inversores alemanes en Turquía están seguros. Hay miles de empresas alemanas. ¿Se ha investigado alguna hasta hoy?”, preguntó Kalin.

“No tenemos ningún problema con los ciudadanos alemanes. Queremos que vengan más turistas. Son nuestros huéspedes”, añadió.

“Pero ¿quiénes son las personas investigadas aquí por la Justicia? Son personas que según las comprobaciones de la Policía estaban realizando actividades ilegales. Meterlos en el mismo saco que a los demás ciudadanos es una irresponsabilidad política”, insistió el portavoz.

Se refería así a la detención de varios ciudadanos alemanes, y en especial al reciente ingreso en prisión preventiva de Peter Steudtner, detenido el 12 de julio pasado junto a otros activistas, entre ellos la directora de la rama turca de Amnistía Internacional, Idil Eser, mientras realizaba un taller sobre seguridad informática y derechos humanos en Estambul.

La Fiscalía turca acusa a todos los integrantes del grupo de “colaboración con organizaciones terroristas” por supuestamente enseñar cómo encriptar información delicada en aparatos electrónicos y ocultarla a la policía.

“Alemania se apunta a la moda de estar en contra de Turquía y sobre todo en contra de nuestro presidente, para sumar puntos políticos”, dijo Kalin.

Además, acusó a Alemania de ser el país que acoge el mayor número de miembros de organizaciones consideradas terroristas por Turquía, tanto de la guerrilla kurda PKK (también por Berlín clasificada como terrorista) como de la cofradía del predicador exiliado Fethullah Gülen, al que Ankara responsabiliza del fallido golpe de Estado del verano pasado.

“Les hemos enviado innumerables actas de extradición y ellos nos responden que hay independencia judicial. Vale, lo respetamos. ¿Por qué no respetan que nosotros también tenemos independencia judicial?”, preguntó Kalin.

Ayer, el Ministerio de Exteriores alemán citó al embajador turco en Berlín para trasladarle sus quejas por la detención de Steudtner, y esta mañana, el Ministerio turco del mismo ramo le trasladó al encargado de negocios alemán en Ankara su protesta por ese gesto.

Esta mañana, el ministro alemán de Exteriores, Sigmar Gabriel, advirtió de que no puede garantizar la seguridad de sus conciudadanos ni de las empresas alemanas en Turquía y anunció que Berlín revisará sus relaciones con Ankara.

Gabriel se manifestó además a favor de revisar también las ayudas que recibe Turquía de la Unión Europea como candidato a la adhesión.

El ministro recordó que desde el “por fortuna” fallido golpe de estado en el país euroasiático, 22 alemanes han pasado por prisiones turcas y nueve de ellos siguen encarcelados.