La Audiencia pregunta a las partes si apoyan la recusación del juez De Prada

La Audiencia Nacional ha dado de plazo hasta el miércoles a las partes personadas en el juicio del caso Gürtel (Fiscalía, defensas y acusaciones) para que manifiesten su adhesión u oposición a la recusación planteada para apartar del tribunal al magistrado José Ricardo de Prada por su amistad con el exjuez Baltasar Garzón, primer instructor de esta causa.

En una providencia notificada hoy, la secretaria judicial de la sección segunda de la Sala de lo Penal, a la que pertenece de Prada, otorga de plazo hasta el miércoles a las dos de la tarde para que las partes presenten sus escritos en respuesta a la recusación planteada por uno de los acusados, el considerado número 2 de la trama Gürtel Pablo Crespo, al que representa el letrado Miguel Durán.

La Audiencia Nacional ha habilitado el sábado como día hábil para presentar las alegaciones, a favor o en contra de la recusación, así como otros motivos de recusación del juez que no hayan sido reflejados en el incidente planteado por Crespo, han informado fuentes jurídicas.

Las fuentes consultadas han señalado que la resolución de la secretaria judicial no es una admisión a trámite de la recusación, sino que obedece a lo establecido en el artículo 223 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ).

Según este artículo, una vez formulada la recusación, se dará traslado a las demás partes del proceso para que en un plazo común de tres días, manifiesten si se adhieren o se oponen a la causa de recusación.

Las fuentes consultadas han señalado que los trámites derivados de este nuevo incidente de recusación no tienen por qué retrasar en principio el comienzo del juicio, previsto para el 4 de octubre, si bien, de ser finalmente aceptada a trámite, los plazos previstos para resolver el incidente podrían llegar a dilatar la fecha de inicio de la vista oral.

El pasado miércoles, Crespo pidió que se apartara a De Prada del juicio a la trama Gürtel debido a su amistad con el primer instructor de la causa, Baltasar Garzón, así como por los vínculos de su hija, Pilar Eirene de Prada, con el abogado Gonzalo Boyé, que ejerce una de las acusaciones en esta causa.

Ayer mismo, el juez Garzón envió un comunicado en el que niega haber pagado “jamás honorario alguno” a De Prada por las conferencias que ha dado en la Fundación que él, la Fundación Internacional Baltasar Garzón (FIBGAR) y asegura que el magistrado de la Audiencia Nacional siempre ha participado pro bono (para el bien público) como “la mayoría de los expertos en Derechos Humanos” que han intervenido en conferencias y actos de la fundación.

Se trata de la tercera recusación planteada para apartar a un miembro del tribunal que juzgará la primera época de Gürtel (1999-2005), después de la salida de dos de sus primeros integrantes, los magistrados Enrique López y Concepción Espejel, por afinidad ideológica al PP, encausado como responsable civil en esta causa a título de partícipe lucrativo.