Brasileños responden con cacerolazo a la propaganda del partido de Rousseff

Miles de brasileños respondieron hoy con abucheos, cacerolazos y bocinazos al programa de propaganda política de diez minutos transmitido hoy en cadena nacional de radio y televisión por el gubernamental Partido de los Trabajadores (PT), la formación de la presidenta Dilma Rousseff.

Los cacerolazos de protesta contra el Gobierno fueron escuchados en las principales ciudades del país, principalmente en Río de Janeiro, Sao Paulo, Brasilia, Belo Horizonte, Recife y Porto Alegre, en la noche de este martes durante la transmisión del programa de propaganda político del PT, según diferentes medios locales.

Igualmente fueron escuchados gritos pidiendo la salida del PT del poder y la renuncia de la jefe de Estado o que tildaban de ladrón al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), antecesor y padrino político de Rousseff, y uno de los fundadores del Partido de los Trabajadores.

El ruido se concentró principalmente en los barrios más acomodados de las capitales regionales.

La protesta fue similar a la que se escuchó en marzo pasado durante un pronunciamiento de la mandataria transmitido igualmente en red nacional de radio y televisión.

Tras ese cacerolazo Rousseff se abstuvo de hacer un pronunciamiento en televisión para la celebración del Día del Trabajo el pasado 1 de mayo e igualmente prefirió no aparecer en el programa transmitido este martes por el PT.

Fue la primera vez en trece años que un presidente brasileño se abstuvo de pronunciar un discurso en televisión para conmemorar el Día del Trabajo. La tradición fue iniciada por Lula.

El primer cacerolazo contra Rousseff fue poco después de las marchas de protesta contra el Gobierno que movilizaron en marzo a cerca de dos millones de brasileños en decenas de ciudades.

El índice de popularidad de Rousseff está en su mínimo histórico cuatro meses después de haber iniciado su segundo mandato de cuatro años debido al rechazo de la población al ajuste fiscal anunciado por el Gobierno para hacer frente a la grave crisis económica y que la entonces candidata a la reelección negó que pondría en marcha.

Las protestas también fueron alimentadas por el gigantesco escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras que salpicó a medio centenar de políticos, en su gran mayoría de la coalición oficialista que apoya a la jefa de Estado.

El programa transmitido hoy fue aprovechado precisamente por el presidente del PT, Rui Falcao, para anunciar que la formación expulsará a los integrantes que sean condenados por corrupción.

“Cualquier persona que cometa corruptelas e ilegalidades no continuará en los cuadros del partido”, afirmó el dirigente.

Falcao recordó que líderes de otros partidos también son investigados por escándalos de corrupción, incluso de formaciones de la oposición, y advirtió que el PT “no acepta que los medios quieran criminalizar a todo el partido por errores graves cometidos por algunos de sus afiliados”.

La investigación del escándalo en la Petrobras provocó la detención del extesorero del PT Joao Vaccari Neto, imputado de participar de la red que desvió miles de recursos de la petrolera para financiar partidos políticos.