Bruselas elogia el pacto antiyihadista y no ve contradicción entre cadena perpetua y DDHH

En una comparecencia ante la Comisión Mixta para la UE que componen diputados y senadores, Timmermans ha calificado de “histórico” este acuerdo y ha considerado que España ha vuelto a dar “ejemplo” al abordar este debate, como lo hizo tras los atentados del 11-M, cuando su reacción fue la de acusar “solo a los terroristas”, no al Islam, y trabajar en la búsqueda de soluciones a los problemas buscando la “armonía social”.

Uno de los puntos más polémicos del pacto antiyihadista --que en realidad es una proposición de ley por la que se reforma el Código Penal-- es la referencia que hace a la prisión permanente revisable, máxima pena que contempla la actual reforma del Código Penal y que cuenta con el rechazo de toda la oposición al entender que equivale a una cadena perpetua.

Timmermans, que pertenece al Partido Laborista holandés, ha afirmado que “no hay contradicción” entre la Convención Europea de Derechos Humanos y la cadena perpetua, en vigor en distintos Estados miembros de la UE y del Consejo de Europa, organizacion de la que surgió la citada convención.

El comisario encargado de Estado de Derecho y Carta de Derechos Fundamentales ha defendido la necesidad de que los países europeos formen una coalición para luchar contra el terrorismo, pero que lo que hagan de manera que aborden las “raíces” de esta conducta, con el objetivo de impedir que haya personas que se sientan “tentadas a lanzarse” en los brazos de esta ideología “fundamentalista”.

En este sentido, ha sugerido como idea la creación de un foro de servicios de inteligencia y de seguridad europeos que pudieran compartir información y cooperar, teniendo la garantía de que esa información compartida nunca fuera a ser filtrada.

También ha mencionado la necesidad de mejorar el funcionamiento del espacio europeo sin fronteras Schengen, “no aboliéndolo” sino creando un sistema “mejor de protección de las fronteras externas” de la UE.

OJO CON LAS SOLUCIONES SIMPLISTAS

El comisario se ha sometido directamente a las preguntas de los parlamentarios evitando hacer una introducción inicial. Cuestionado por el auge de los nacionalismos en Europa, ha señalado que se trata de un problema que está “en la naturaleza humana” y que forma parte de la historia del continente, especialmente en tiempos difíciles en los que surgen problemas.

Timmermans ha recomendando tener cuidado con aquellos partidos que ante situaciones complejas ofrecen “soluciones muy simplistas”. Y para hacerles frente, ha dicho, no hay que hacer “contrapropaganda” sino “demostrar resultados”.

En otro momento de su comparecencia, Timmermans se ha mostrado impresionado por el “ejemplo increíble” que España representa como modelo de instauración de una democracia en un tiempo relativamente corto y de manera exitosa.

Por otra parte, el comisario se ha mostrado contrario a que la UE se embarque ahora en un proceso de reforma de los Tratados y, respecto de la situación de acoso a la oposición en Venezuela por parte del Gobierno de Nicolás Maduro, se ha limitado a señalar que la UE “está obligada a establecer un diálogo en la medida de sus posibilidades y allá donde pueda con el fin de facilitar el diálogo entre los diferentes grupos” enfrentados en ese país.