La CUP denuncia filibusterismo para evitar que se voten conclusiones de la comisión

La diputada de la CUP Mireia Boya ha denunciado hoy que desde hace unos días en el Parlament se ve “filibusterismo” por parte de algunos grupos para tratar de evitar que las conclusiones de la comisión de estudio del proceso constituyente se voten en el siguiente pleno.

En declaraciones a TV3, Mireia Boya ha recordado que hasta el mediodía del viernes la Mesa tiene tiempo para poder incluir en el orden del día del pleno el debate de las conclusiones, pero también se puede añadir un punto en el orden del día, ya que “cualquier vía es válida siempre que se acaben votando”.

Según esta misma diputada de la CUP, “llevamos algunos días de práctica del filibusterismo parlamentario” por parte de ciertos grupos de la oposición, es decir, de poner trabas para retardar la aprobación de alguna cosa, “porque lo que no quieren es que se lleguen a votar las conclusiones de la comisión” con el pretexto de la advertencia realizada por el Tribunal Constitucional (TC).

Para la CUP, ha destacado Boya, “el TC no tiene legitimidad”, por lo que no hay ninguna razón para que las conclusiones no se voten y se aprueben, ha señalado,

Sobre las diferencias entre la CUP y JxSí con respecto a la interpretación de la hoja de ruta soberanista, ha indicado que su formación “no nos acabamos de creer la teoría del botón rojo, es decir, que la desconexión se produce un determinado día y con un sólo gesto”.

“No nos la acabamos de creer -ha explicado Mireia Boya- porque cada día vemos que desde el Govern no se desobedece al TC, y la desobediencia tiene que ser cotidiana, no podemos esperar al momento de la desconexión final”.

La CUP considera que el “mecanismo unilateral de ejercicio democrático” que se prevé en las conclusiones “es un referéndum unilateral, porque no puede ser pactado con el Estado, ni ser como el 9N, ya que esto último no fue un referéndum, sino una consulta” y no fue binaria para votar únicamente un 'sí' o un 'no'.

“El referéndum unilateral -ha apuntado- es un instrumento”, motivo por el que “trabajamos con la idea de que se pueda hacer el primer semestre de 2017”.

Sobre la cuestión de confianza, ha indicado que si hay acuerdo en dos elementos, la incorporación de un referéndum en la hoja de ruta y el proceso constituyente, no será un problema porque “son las dos vías más rápidas para romper con el Estado español”.

Ha reiterado, en este sentido, que la CUP no vinculará la cuestión de confianza a ningún otro elemento, y tampoco a los presupuestos, sobre los cuales ha dicho que lo que no va a hacer su grupo “es dar un cheque en blanco” sin conocer su contenido.