Camboya elige un nuevo senado sin oposición al partido gobernante

Los colegios electorales abrieron hoy en Camboya para elegir los miembros del Senado, en una votación en la que se espera una amplia victoria del partido gubernamental tras la ilegalización del principal partido de la oposición.

La cámara alta cuenta con 62 senadores, 58 de los cuales son elegidos en esta votación a la que solo están convocados a las urnas los 123 miembros de la Asamblea Nacional y los 11.572 consejeros comunales o administración local.

Los otros cuatro senadores serán designados por el Rey Sihamoni, que nombrará a dos, y por la cámara baja, que elegirá a los otros dos.

Se espera que el Partido del Pueblo de Camboya (PPC) del primer ministro Hun Sen se lleve casi la totalidad de los senadores en juego en esta votación en la que no participa el opositor Partido para el Rescate Nacional de Camboya (PRNC).

La formación fue ilegalizada en noviembre, dos meses después de que su líder, Kem Sokha, fuera detenido por cargos de traición, y sus escaños en el parlamento y en los gobiernos locales, más de 5.000, fueron reasignados a miembros del PPC y otras formaciones menores.

La ofensiva judicial, que también llevó al cierre de prensa independiente y a la expulsión de ONGs del país, comenzó tras los malos resultados del PPC en las municipales de junio y antes de las generales previstas el próximo 29 de julio.

La oposición y grupos de defensa de los derechos humanos negaron el carácter democrático a la votación para elegir el nuevo Senado que calificaron como una “farsa”.

“La comunidad de naciones democráticas debe denunciar y condenar esta farsa electoral que será seguida de otra: las elecciones legislativas del 29 de julio de este año”, dijo el exlíder del PRNC, Sam Rainsy, autoexiliado en París, en una carta al diario The Phnom Penh Post.

“Las elecciones al Senado no son otra cosa que un intento del partido gobernante de sacar provecho de su descarado acto de robo político”, dijo el diputado filipino Tom Villarin, en un comunicado de Parlamentarios del Sudeste de Asia para los Derechos Humanos.

La campaña contra oposición y críticos llevó a Estados Unidos y a la Unión Europea a retirar las ayudas a la comisión electoral para organizar la votación de julio, en las que Hun Sen espera revalidar el cargo que ostenta desde 1985.

Con la ayuda de la ONU, Camboya organizó las primeras elecciones democráticas en 1993, tras más de dos décadas de guerra civil, incluido el régimen del Jemer Rojo, durante el que murieron unos 1,7 millones de personas.