Catalá pide no ceder a presiones nacionalistas en las relaciones con las CCAA

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha dicho hoy que para “arreglar” las relaciones institucionales entre el Gobierno y las comunidades lo que hay que hacer es “pensar en el interés general” y no en objetivos partidistas ni en presiones nacionalistas “porque ese fanatismo no lleva a ninguna parte”.

Catalá, que ha respondido así en el Pleno del Congreso a una interpelación del Grupo Mixto sobre el “abuso” realizado por el Gobierno de los recursos inconstitucionales a leyes autonómicas, ha subrayado que las normas “no están hechas para jugar a la política ni crear problemas a los ciudadanos sino para resolverlos”.

El titular de Justicia ha considerado que para evitar la conflictividad hay que “trabajar mejor las normas”, tanto en la calidad como “en el diálogo y el debate” y ha insistido en que no se haga una utilización interesada de las mismas.

Catalá ha asegurado que el Gobierno no abusa “en absoluto” de la litigiosidad ni de las facultades que el ordenamiento jurídico pone a su disposición.

El ministro ha planteado que una manera de reducir la litigiosidad sería ir al origen, a la producción normativa española y aquí ha hecho una reflexión “sobre el número tan alto de leyes” que se producen en España por todos los órganos competentes.

Por ello, ha apostado por un mecanismo que analice la necesidad de las normas antes de su aprobación.

Catalá se ha mostrado convencido de que en un Estado tan descentralizado como el español hay que “extremar los mecanismos de colaboración y coordinación” entre las distintas administraciones en el marco de lealtad institucional.

Por ello, ha pedido “trabajar juntos” para evitar la duplicidad de competencias y procedimientos y la excesiva regulación que “lastra” el crecimiento y genera “cierto desapego” por parte de los ciudadanos.

En este sentido, el diputado de Compromís Ignasi Candela, que defendió la interpelación, ha pedido al Gobierno que no recurra al Constitucional para “solucionar conflictos políticos” pero también le ha exigido mejorar con propuestas el funcionamiento del Estado.

Propuestas, ha dicho, que se comenzarán a discutir a partir del día 2 de octubre “cuando se abra el melón constitucional”.

Además, el diputado de Compromís ha denunciado el “círculo vicioso” que genera el “abuso” de la suspensión automática de disposiciones autonómicas y “los retrasos escandalosos a los que nos tiene acostumbrados el Constitucional”.

Por ello, este diputado ha considerado que el abuso de lo previsto en el artículo 161.2 de la Constitución genera es “una profunda desafección” entre los ciudadanos hacia el Gobierno y hacia las instituciones del Estado.

Y ha añadido que la estrategia gubernamental de rehuir todo conflicto político y llevarlo a los tribunales ha creado un “profundo daño” a las instituciones.

En este sentido, ha recordado que la cuestión territorial “no es sólo Cataluña”, pero, sobre todo, requiere “altura de miras y sentido de Estado”.