Cataluña y Baleares propondrán en común un nuevo sistema de financiación

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, y la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, han pactado hoy trabajar en la elaboración de una propuesta común de nuevo sistema de financiación autonómica.

Armengol ha anunciado tras reunirse en Palma con Puigdemont que los dos ejecutivos pondrán en marcha un grupo de trabajo sobre el modelo de financiación que liderará el economista menorquín experto en balanzas fiscales Guillem López Casasnovas.

La presidenta balear ha explicado que el archipiélago coincide con Cataluña en que aporta al sistema muchos más recursos de los que recibe por el hecho de ser regiones de las más dinámicas económicamente, una “infrafinanciación” que en el caso de Baleares se agrava por las limitaciones de la insularidad.

“Compartimos una situación de infrafinanciación histórica desde el Gobierno de España y el hecho de ser maltratados de forma estrambótica una y otra vez”, ha dicho Armengol, quien ha defendido que la alianza estratégica con Cataluña debe “romper el status quo” y llevar a un nuevo sistema de financiación autonómica en el que Baleares quiere que prime el principio de ordinalidad.

Puigdemont ha incidido en que ambas comunidades sufren “un agravio que no se puede perpetuar”, por lo que trabajarán juntas “técnicamente” en elaborar una propuesta que beneficie las dos regiones, aunque el presidente catalán ha subrayado que su ideal de financiación es el estado propio.

“Esperar una justicia equitativa como la planteada en 2012 con el pacto fiscal ya sabemos que no es posible pero al menos que sea lo menos injusto posible y en este sentido sí podemos hablar de un frente técnico en el que estamos”, ha afirmado.

Partiendo cada comunidad de “sus realidades y sus proyectos”, y teniendo en cuenta que “cada uno tiene su estrategia”, Cataluña y Baleares compartirán “una mesa de trabajo conjunta desde el punto de vista técnico”. “Aunque nuestro mejor sistema de financiación de futuro se llama estado independiente”, ha dicho Puigdemont.

“Nosotros en eso no entramos”, ha matizado Armengol para distinguir entre los proyectos políticos diferenciados y el interés común en un nuevo sistema de financiación.

Los mandatarios de ambas comunidades han acordado también establecer una estrategia conjunta para reclamar al Gobierno central el corredor ferroviario mediterráneo que Puigdemont ha calificado como “un deber histórico” con un territorio que concentra el 30 % del PIB y el 37 % de las exportaciones.

Armengol ha insistido en que la carencia de ese corredor ferroviario es “una anomalía” y ha señalado que, para Baleares, facilita el transporte marítimo.

Puigdemont y Armengol han coincido en que el encuentro de hoy supone recuperar la normalidad en las relaciones entre las dos comunidades que pueden trabajar juntas en varios ámbitos.

El objetivo es lograr “el efecto multiplicador de lo que es una simple suma”, según Puigdemont. Para Armengol supone trasladar al ámbito institucional los vínculos normales entre los conciudadanos de ambas comunidades y tender puentes para una relación muy fluida, con un planteamiento que “huye de toda crispación”.