Compostela Aberta presenta una “alternativa viable” para la nueva EDAR

El alcalde de Santiago, Martiño Noriega y el edil de medio ambiente, Xan Duro, han presentado hoy una propuesta para la ubicación para la nueva estación depuradora de aguas residuales (EDAR) que necesita la ciudad, para la que apuesta por emplear como ubicación las instalaciones en la misma parcela que acoge la actual depuradora de la Silvouta.

El regidor de la capital gallega ha explicado que el proyecto, que hoy se ha presentado a los grupos de la oposición y próximamente se remitirá a la Sociedad Estatal Aguas de las Cuencas de España (Acuaes), del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y a Augas de Galicia, está avalada por el “prestigioso” departamento de Ingeniería Química de la USC “lo que no es un aspecto menor”.

La alternativa presentada por el Gobierno pasa por la ampliación de la capacidad de la EDAR de A Silvouta mediante la utilización de una nueva tecnología denominada “granular aerobia” y que es una alternativa de “alta potencialidad para el tratamiento de las aguas residuales urbanas y que requiere de instalaciones de dimensiones mucho más reducidas a las de otras tecnologías de depuración”.

Noriega ha explicado que esta iniciativa es pionera porque se trata de una tecnología reciente que hace unos años aún no estaba operativa.

El plan presentado por el alcalde y por el concejal de Medio Ambiente contempla tres fases diferenciadas para la puesta en marcha de la nueva depuradora, sin afectar al funcionamiento de la actual.

Además, esta tecnología de granulación permite “una ocupación de terreno hasta cuatro veces menor que las de las depuradoras tradicionales, una mayor rapidez en la construcción de la infraestructura y un ahorro económico que podría oscilar entre el 30 y el 50 por ciento de lo previsto.

De este modo, las estimaciones situarían el coste de la depuradora en unos 40 millones mientras que el importe para la de O Souto que proponían desde la Administración central llegaba a los 70 millones.

Además, al emplearse la ubicación actual, la propuesta se podría ejecutar sin necesidad de tramitar un nuevo Estudio de Impacto Ambiental o realizando un Estudio de Impacto Ambiental simplificado que podría estar resuelto en tres meses por lo que también se agilizarían otros trámites administrativos.

Según el alcalde, con esta propuesta es “posible salvar los fondos europeos, es posible que cueste menos y ocupar menos, un menor impacto y contentar a todas las partes, vecinos y ayuntamientos limítrofes”.

Noriega ha asegurado que la presentada hoy es “una muy buena solución” que dará respuesta a un problema prolongado durante más de 25 años.

“Nuestra apuesta es esta y creemos que es viable” ha insistido el regidor que ha confiado en el respaldo de los grupos “para que esta sea una propuesta de ciudad”.