El Congreso debate hoy derogar ley permite a TC suspender a quien le desobedezca

El Congreso de los Diputados debate hoy la toma en consideración de sendas proposiciones de ley presentadas por los nacionalistas vascos y catalanes por las que pretenden derogar la ley que permite al Tribunal Constitucional suspender o sancionar a cargos que no acaten sus resoluciones.

Son dos iniciativas firmadas por el PNV y por el Partit Demòcrata Catalá (PDeCAT) para acabar con la reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional que impulsó el PP en 2015 en pleno auge del desafío soberanista catalán y cuya constitucionalidad ha avalado el propio Tribunal en una sentencia reciente.

La posición del PSOE -que aún no ha anunciado el sentido de su voto- será determinante para la toma en consideración o no de las proposiciones, toda vez que Unidos Podemos ya ha anunciado que las apoyará y Ciudadanos que votará en contra.

La ley que se cuestiona es la que otorga al Constitucional potestad para obligar a la obediencia de sus resoluciones mediante la adopción de medidas cautelares y, singularmente, la suspensión en el ejercicio de sus funciones a los altos cargos que desobedezcan sus sentencias.

Desde su entrada en vigor, han sido varios los incidentes de ejecución presentados por el Gobierno a través de la Abogacía del Estado a raíz de las distintas decisiones que ha ido adoptando el Parlamento catalán dentro de la denominada “hoja de ruta” soberanista.

Hasta el momento, el tribunal de garantías no ha suspendido a ningún cargo ni ha ejercido esas competencias que le atribuye la ley, si bien trasladó al fiscal un posible delito de desobediencia por parte de la presidenta del Parlamento de Cataluña, Carme Forcadell, iniciativa que ha desembocado en su imputación por parte del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

El último incidente de ejecución lo admitió a trámite la pasada semana en una resolución en la que suspendió de forma cautelar el referéndum independentista del próximo año y volvió a apercibir a los afectados de las posibles responsabilidades -incluso penales- que conllevaría su desobediencia.

Ese el contexto en el que llega al Congreso el debate de las iniciativas del PNV y del PDeCAT, la antigua Convergencia, contra una reforma que en su momento tuvo en contra a todos los partidos de la oposición.

La iniciativa del PNV pretende además derogar la reforma anterior, por la que se recuperó el recurso previo de inconstitucionalidad contra los Estatutos de Autonomía.

A juicio de los nacionalistas vascos, ambas reformas “perjudican los equilibrios constitucionales y no son adecuadas para las circunstancias políticas actuales”, según el portavoz de Justicia del grupo vasco, Mikel Legarda.

Por su parte, la proposición del PDeCAT propugna acabar con una reforma que ha convertido al Constitucional en “un tribunal político” y que “altera el diseño constitucional del Estado y el equilibrio de poderes”.