El decano de la Corte Suprema de Brasil tilda de “golpista” a un hijo de Bolsonaro

El decano de la Corte Suprema de Brasil, Celso de Mello, tildó hoy de “golpista” a un hijo del candidato a la Presidencia Jair Bolsonaro, que en un vídeo divulgado en internet afirmó que bastan “un soldado y un cabo” para “cerrar” ese tribunal.

En una nota dirigida al diario Folha de Sao Paulo, el magistrado consideró esa declaración “inconsecuente y golpista” y lamentó que proceda de Eduardo Bolsonaro, hijo del candidato presidencial de la ultraderecha y reelegido para un escaño en la Cámara de Diputados el pasado día 7, con 1,8 millones de votos.

Según De Mello, esa manifestación refleja una “inaceptable visión autoritaria” y compromete “la integridad del orden democrático y el respeto indeclinable que se debe tener por la supremacía de la Constitución de la República”.

El vídeo, que circuló profusamente en la internet durante este fin de semana, fue grabado hace cuatro meses, cuando el diputado ofrecía una conferencia y fue preguntado sobre la posibilidad de que un eventual triunfo electoral de Jair Bolsonaro fuera desconocido por la Corte Suprema.

“No creo que eso sea probable, pero, en ese caso, entraríamos en un estado de excepción y el tribunal va a tener que pagar para ver”, respondió Bolsonaro, quien apuntó que si fuera necesario “cerrar” la corte, bastaría con enviar “un soldado y un cabo”.

Incluso planteó que si un magistrado del Supremo fuera detenido no habría ninguna manifestación popular de protesta, aunque luego, una vez conocido el vídeo, aclaró que apenas había respondido a una pregunta “absurda” y que lo hizo sólo con “unas bromas” que escuchó “en la calle”.

Reiteró además que si la candidatura o una victoria de su padre en las urnas fuera impugnada “eso demostraría una situación fuera de la normalidad democrática” y enmarcó la difusión de ese vídeo en los “ataques” que sufre el abanderado de la ultraderecha, favorito para ganar la segunda vuelta electoral del próximo domingo.

Según las últimas encuestas, Bolsonaro será elegido presidente con cerca del 60 % de los votos, mientras que su adversario en la segunda vuelta, el progresista Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), obtendría en torno al 40 %.