Cospedal elogia las reales órdenes militares por preservar los valores de la milicia

La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha visitado la sede de las Reales y Militares Órdenes de San Fernando y San Hermenegildo, donde ha destacado su papel para preservar los valores de las Fuerzas Armadas y agradecerles que “mantengan los principios que han inspirado tradicionalmente” a la milicia española.

La ministra ha resaltado que hacen un trabajo “justo y equitativo”, aunque por lo general desconocido, pero ha incidido en la importancia de contar con las Órdenes Militares para que se reconozca el mérito de los militares españoles, según informa su departamento en un comunicado.

A su llegada ha sido recibida por el presidente de la Asamblea de la Orden de San Fernando y Gran Canciller de la Orden de San Hermenegildo, el almirante general Manuel Rebollo, y por el presidente del Tribunal Militar Central y jefe del acuartelamiento, general consejero togado Rafael Matamoros.

Ha mantenido una reunión con los dieciséis vocales que constituyen la Asamblea, todos ellos oficiales generales de los Ejércitos de Tierra, Aire, la Armada, Cuerpos Comunes y la Guardia Civil.

También ha mantenido un encuentro con el personal civil y militar destinado en las Reales y Militares Órdenes de San Fernando y San Hermenegildo, que se crearon a principios del siglo XIX, durante el reinado de Fernando VII.

La Real Militar Orden de San Fernando fue creada en 1811. Agrupa a los condecorados con la más alta y prestigiosa recompensa militar española: la laureada, en sus dos modalidades, individual y colectiva. Desde 2001 incluye asimismo a los condecorados con la Medalla Militar Individual.

Por su parte, la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, creada en 1814, tiene como objetivo el recompensar “el intachable proceder” y “la constancia en el servicio” de todos aquellos oficiales y suboficiales, que por su conducta y tiempos de servicio, se hagan acreedores al ingreso en esta prestigiosa orden.