Otra dimisión en diferido en el PP: Cospedal sigue los pasos de Rajoy, Cifuentes y Aguirre
María Dolores de Cospedal ha anunciado este lunes que abandona el puesto de secretaria general del PP para evitar que los audios del ex comisario José Manuel Villarejo consigan “perjudicar y dañar” su imagen personal y la del partido. La polémica generada por las cintas publicadas por Moncloa.com, el las distancias que ha marcado con ella Pablo Casado y las presiones internas han podido con ella, pero sólo en parte: mantendrá su escaño en el Congreso de los Diputados y seguirá como presidenta de la Comisión de Exteriores de la Cámara Baja.
La que fuera número dos del PP continúa con la línea de “dimisiones en diferido” que inició Esperanza Aguirre, calcó Cristina Cifuentes -aunque reduciendo los plazos- y también se aplicó el propio Mariano Rajoy tras la moción de censura. Ninguno hizo una retirada completa de la política, sino que abandonaron la vida pública poco a poco. Cargo a cargo.
“Ha llegado el momento, es lo mejor para mí, para el PP y para España”. Con estas palabras, el expresidente del PP y del Gobierno dimitió como líder del partido, tras perder la Moncloa en un movimiento político al que no vio posibilidades de prosperar hasta el último momento. Rajoy dimitió primero como presidente del PP y, posteriormente, como diputado.
Tras ocupar su escaño desde 1986, decidió abandonar el Congreso y solicitar su reingreso en el Cuerpo de Registradores de la Propiedad. Lo hizo un viernes a última hora del día y a través de una nota de prensa. En su caso, no quiso dimitir como presidente del Gobierno, la posibilidad que le ofrecieron Pedro Sánchez y el PNV para frenar la moción de censura.
Aguirre y Cifuentes siguieron un camino casi paralelo: dimitieron primero como presidentas de la Comunidad de Madrid, luego como presidentas del PP madrileño y finalmente dejaron sus escaños. La primera en el Ayuntamiento de Madrid y la segunda en la Asamblea. La única diferencia entre ambas fue el tiempo que transcurrió entre cada retirada parcial.
En el caso de Cifuentes, las informaciones publicadas por eldiario.es sobre su máster irregular en la Universidad Rey Juan Carlos, la difusión por parte de OkDiario de un vídeo en el que sustraía unas cremas de un supermercado y las presiones de Rajoy le empujaron a dimitir en un plazo de 11 días (la primera dimisión fue el 25 abril, la segunda el 27 del mismo mes y la tercera el 8 de mayo de 2018).
La cascada de dimisiones tardó más en el caso de Aguirre: la última fue en 24 de abril de 2017, cuando la “lideresa” estaba acorralada por el encarcelamiento de Ignacio González, su mano derecha, por el saqueo del Canal de Isabel II. Antes, en septiembre de 2012, dejó la Comunidad de Madrid; y en febrero de 2016, la presidencia del PP madrileño.
El PP, entre el apoyo tímido y el silencio
La respuesta del PP a estas dimisiones por capítulos se ha movido entre el silencio y el apoyo tímido. Con Cospedal, el PP ha preferido tener un perfil fajo y esquivo con los medios de comunicación. En una rueda de prensa ofrecida este lunes, el secretario general, Teodoro García Egea, no ha querido valorar la dimisión de quien apoyó a Casado en el proceso de primarias del pasado verano. El propio Casado ha querido, durante estos días, marcar distancias con ella.
Cuando estalló el escándalo del máster de Cifuentes, el partido mantuvo el mismo silencio. Tan solo hubo un tuit de la propia Cospedal en el que decía que las informaciones de eldiario.es eran una “cacería”. La situación cambió tras el Congreso Nacional del PP en Sevilla, cuando la entonces secretaria general dijo que el PP tenía que “cuidar” a “los suyos”, Rajoy respaldó a Cifuentes y ésta recibió un aplauso de un minuto y nueve segundos. El respaldo se diluyó con las nuevas revelaciones y se acabó con el vídeo de las cremas.
En el caso Aguirre, el partido despachó su última dimisión en dos párrafos: “El PP respeta la decisión personal tomada (...) valora y reconoce la larga trayectoria política de Esperanza Aguirre, desarrollada en distintas Administraciones, así como en el partido, y considera que ha sido una persona relevante para esta organización”. Una despedida fría para la que fue la voz interna más crítica con la gestión de Rajoy, calificada por Aguirre como “socialdemócrata”.
Más apoyo tuvo Rajoy, él único de la lista que no se fue en medio de un escándalo. El expresidente del Gobierno se despidió de los suyos en particular y de la vida pública en general en el proceso de primarias de este verano. El partido le dijo “adiós” con un vídeo en el se resumía su larga trayectoria política y en el que diversos líderes europeos, como Theresa May, Angela Merkel, Jean Claude Juncker o Antonio Costa le homenajeaban. Rajoy se apartó de la presidencia del PP sin expresar quién era su candidato favorito y dando las gracias a sus compañeros. Cospedal ha preferido no agradecerle nada a nadie en su comunicado de despedida.
