Ecologistas condenan la “cruenta agresión” contra activistas en Canarias

Las organizaciones ecologistas Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife y WWF han condenado hoy de forma conjunta “la cruenta agresión” sufrida por activistas de Greenpeace durante una protesta “pacífica” contra las prospecciones petrolíferas de Repsol en aguas de Canarias.

Los grupos ecologistas manifiestan su repulsa “unánime” en un comunicado, en donde lamentan que ayer “dos activistas de Greenpeace” resultaran heridos en un incidente “injustificable” entre una lancha de la Armada española y otra de esta organización.

Greenpeace afirma que su embarcación fue “embestida” por la lancha de la Armada, algo que el Ministerio de Defensa ha negado.

El ministro de Industria, José Manuel Soria, ha explicado que la Armada tiene que preservar el orden en la zona de los sondeos petrolíferos y “eso es lo que ha hecho y lo que va a seguir haciendo”.

En el comunicado de hoy los grupos ecologistas aseguran que “el Gobierno no sólo se pliega a los intereses de la multinacional en contra de quienes defienden los intereses de la mayoría social y del medio ambiente, sino que ahora también se convierte en su brazo represor”.

Las organizaciones quieren dejar “claro” que la protesta era pacífica, por lo que “no tiene ninguna justificación el uso de la fuerza, en este caso a través de la Armada Española, una violencia que lamentablemente ha acabado con dos activistas heridos”.

Añaden que los activistas de Greenpeace estaban defendiendo “lo mismo que pide a gritos la inmensa mayoría de la población canaria y del resto del Estado”, como se ha demostrado una y otra vez en las repetidas y multitudinarias movilizaciones de rechazo a las prospecciones.

Tras un proceso de evaluación ambiental “plagado de irregularidades para favorecer los intereses de Repsol”, según el comunicado, “el Gobierno, una vez más, y en esta ocasión de forma muy violenta, se pone de lado de esta empresa privada en contra de los intereses generales”.

“Un Gobierno que ataca de forma violenta a los ciudadanos y ciudadanas más conscientes y activos cuando actúan de forma pacífica pierde la poca legitimidad que le pudiera quedar”, añade la nota.