Evo Morales duda de que la fuga de Belaunde perjudique la relación con Humala

El presidente de Bolivia, Evo Morales, dudó hoy de que la fuga del empresario peruano Martín Belaunde de su arresto domiciliario en La Paz pueda perjudicar la relación con el Gobierno del presidente Ollanta Humala, con quien tiene previsto celebrar un encuentro bilateral el próximo 23 de junio.

El mandatario boliviano dijo en una rueda de prensa que ambos países no están “sometidos a la actitud de los delincuentes” y duda de que lo sucedido “perjudique las relaciones bilaterales”.

“Dudo de que esta situación pueda afectar nuestras relaciones diplomáticas”, insistió el mandatario al ser consultado por los medios sobre las consecuencias de la fuga de Belaunde.

Belaunde Lossio, que fue asesor de Humala en la campaña electoral de 2006, se escapó el domingo de madrugada de la vivienda donde estaba arrestado en La Paz poco después de que se anunciara su pronta extradición a Perú, donde debe responder ante la Justicia por denuncias de corrupción.

El empresario está acusado en Perú de gestionar intereses de empresas particulares para adjudicarles contratos con el Estado en Gobiernos regionales y obtener así beneficios económicos personales.

Los Gobiernos de Bolivia y Perú han organizado para el 23 de junio la primera reunión de sus gabinetes para tratar diferentes temas de integración, entre ellos la posibilidad de que finalmente se concrete el aprovechamiento boliviano del puerto peruano de Ilo.

En la rueda de prensa, el mandatario consideró que desde el momento en que Belaunde se fugó “es un delincuente confeso” y hay que tratarlo de esa forma.

Destacó los avances de las investigaciones de búsqueda del prófugo, pero declinó dar detalles sobre las operaciones que se están llevando a cabo.

Morales tomó juramento hoy al nuevo ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero, en reemplazo de Hugo Moldiz, quien fue cesado debido a la fuga de Belaunde.

Romero ya ocupó ese cargo durante parte de la anterior legislatura, aunque renunció para integrarse en la candidatura del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) en las elecciones generales del octubre del 2014.

En ese mismo acto de juramento, el mandatario expresó su molestia con la Policía Nacional y señaló que ese cuerpo “tiene que asumir su responsabilidad si es una institución que está al servicio del pueblo boliviano”.