Exreos Guantánamo en Uruguay firman un acuerdo y dejan protesta en la Embajada de EE.UU.

Los cuatro exreos de Guantánamo que se instalaron hace casi un mes frente la Embajada de Estados Unidos en Montevideo para pedir mejoras en su situación económica en Uruguay cesaron su protesta tras firmar hoy un acuerdo institucional que les brinda vivienda y ayuda económica durante un año, con opción a dos.

“Pretendían tener certezas básicas y creo que hoy entendieron que estaban satisfechas esas dudas o esas necesidades de ciertas seguridades de futuro”, dijo a Efe Christian Mirza, interlocutor elegido por el Gobierno para conseguir destrabar la situación.

Los sirios Ali Husein Shaaban, Abd al Hadi Omar Mahmoud Faraj y Ahmed Adnan Ahjam y el tunecino Abdul Bin Mohammed Ourgy iniciaron una manifestación el pasado 24 de abril para pedir a Estados Unidos “lo necesario para llevar una vida normal como seres humanos”, tras haber estado 13 años presos sin cargos en la base de Guantánamo, que EEUU mantiene en territorio cubano.

Aunque ese país no atendió su reclamación, el Gobierno uruguayo trató de institucionalizar su proceso de adaptación e inserción en Uruguay por intermedio de un convenio con una ONG representante del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que les brinda apoyo financiero y una vivienda en alquiler a cada uno.

Si bien los cuatro declinaron suscribir ese acuerdo por no estar de acuerdo con algunos puntos, finalmente firmaron hoy una “carta compromiso” que aclara el documento anterior y plasma por escrito los derechos y obligaciones que adoptan en su estancia en el país.

“Se lograron básicamente todos los puntos de los que se tenían dudas”, expresó por su parte el abogado de los exreos, Mauricio Pigola.

También el refugiado de origen palestino Mohammed Tahamatan, que no participó en la protesta frente a la Embajada al haber suscrito el acuerdo desde un principio, firmó hoy los cambios y anexos que lo actualizan.

El único en no aceptar el documento propuesto hoy fue el sirio Jihad Ahmad Diyab, que no se sumó a la protesta frente a la Embajada de EEUU y está “evaluando las posibilidades de no radicarse en Uruguay”, según el interlocutor del Gobierno.

Los seis antiguos presos fueron acogidos en diciembre en Uruguay como parte del compromiso del entonces presidente, José Mujica (2010-2015), de colaborar con el gobernante de EEUU, Barack Obama, en el plan de cierre de ese penal para acusados de terrorismo.