Feijóo arremete contra los que dibujan círculos y aprecia “muchísima vanidad”

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha arremetido en el acto de balance de los dos años de gobierno transcurridos de su segunda legislatura contra los que se dedican “a dibujar círculos” y ha dicho que sobra “muchísima vanidad” en la política, y más en los que “todavía no han llegado”.

En el compostelano Multiusos del Sar, donde hubo un recuerdo para la policía muerta en un intento de atraco en Vigo, el líder del PPdeG, que ha celebrado esta efeméride con todo su equipo de gobierno, ha destacado hoy que su partido, el PP, también “tiene rebeldía”, la de transformar la realidad; e indignación e inconformismo, porque “nos decepcionamos cuando no conseguimos los objetivos”.

Pero “ellos pueden dibujar círculos, y nosotros tenemos que cuadrar las cuentas y lo hacemos”, ha ejemplificado, y ha añadido que “ellos -es la expresión que ha utilizado- pueden decir que harán lo que nunca hicieron y lo que nunca harán, y nosotros tenemos que hacer lo que hemos dicho que haríamos”.

También ha manifestado que “estamos aquí para desgastarnos y no para desgastar al país”, y en este sentido ha aludido Feijóo a que por mucho esfuerzo que uno ponga hay metas que todavía han de llegar y, mientras esto no se logra, es lógica la frustración, la misma que pueden tener y tienen los ciudadanos, porque una situación difícil siempre lleva al desencanto.

Así, ha indicado que a la crisis económica y social se le añade la crisis política, y hay personas que se valen de esto para creer que están “por encima de las instituciones democráticas” y para “dar lecciones”, aún cuando en su caso se enfrentan a las vacas flacas “desde los mítines”.

“Pueden -al verbo poder ha recurrido hoy Feijóo con insistencia- brindar al sol y decir que no hay que controlar el déficit y pagar las deudas”, pero el PP, que con “humildad sirve al pueblo”, se ocupa de lo segundo, de “tomar decisiones con la mayor lucidez, y no de lucirnos”.

El presidente gallego ha subrayado que merece la pena servir al país cuando éste más lo necesita, así como preocuparse de romper con el pasado “transformando el presente y asegurando el futuro”, porque hace no mucho España era “la nación que asustaba a Europa” y este sentir ha cambiado, porque el país español es ya un “ejemplo de reacción ante los riesgos de la recesión”, con Galicia a la cabeza por “haberse anticipado”.

La deuda, ha agregado, es en la Comunidad gallega inferior a la del conjunto de las CCAA, hay “estabilidad y fiabilidad” para invertir, se crea empleo y se trabaja con el objetivo de un crecimiento del 2% en el ejercicio correspondiente a 2015.

Todo esto se ha conseguido en la “legislatura socialmente más difícil de la historia autonómica”, pero no toca la autocomplacencia y sí la autoexigencia, “y no es injusto que se nos exija más que a los demás: es un honor” para quienes no conciben otra política que no sea la de los hechos.

Del PSOE ha comentado que un día dice una cosa y al siguiente la contraria; del nacionalismo, singularmente el gallego, que se divide en dos, en cuatro o en cuarenta; y en este croquis gráfico al que ha aludido ha metido a los “experimentos” de las universidades, “de la Sorbona o de la Complutense”.

Ha contrapuesto al PP, que ha “reconstruido la esperanza” en la peor crisis de la democracia, respeta las discrepancias, rectifica y es autocrítico, con partidos que se valen “de mentiras” para intentar arañar votos.

“La soberbia será desmontada con humildad, constancia y esfuerzo” en las municipales gallegas del próximo año, ha garantizado un barón popular que ha dicho defender a la mayoría ciudadana que está siendo “subestimada y menospreciada”, e incluso a las minorías, y “con más intensidad que sus propios representantes”.

En Galicia, ha apostillado, hay nacionalismos y no va a ocurrir lo que está sucediendo en Cataluña, hay socialistas y el gobierno que preside no caerá en la “demagogia” como ellos, y hay una “izquierda rupturista” y el PPdeG no se valdrá de “eslóganes sencillos” como los suyos.

Esta diversidad es real, “y si hay un modo de convivir en la diversidad es Galicia”, ha sostenido, pero con deber, compromiso, orgullo y esfuerzo diario.