Ferraz intenta evitar un nuevo conflicto con Susana Díaz sobre los pactos en Andalucía
Pedro Sánchez quiere evitar a toda costa un nuevo conflicto con Susana Díaz. La presidenta andaluza lanzó este miércoles una advertencia a Ferraz: no dejará que nadie “interfiera” en sus decisiones sobre los pactos. La dirección elude dar una respuesta a la dirigente andaluza y asegura que el PSOE va a ganar el 22 de marzo sin necesidad de llegar a acuerdos, aunque remite a los estatutos del partido para explicar el modus operandi a seguir para las alianzas, que dependen de la Ejecutiva y del Comité Federal.
Ferraz quiere mantener la tregua con la poderosa dirigente andaluza. Por eso, a 24 horas de que Sánchez participe en un acto electoral en Almería, tras varios meses sin aparecer en público junto a la dirigente andaluza, huye de cualquier posibilidad de enfrentamiento. Díaz hizo unas declaraciones durante un acto electoral que se han percibido como una advertencia de que no dejará que la dirección se entrometa en las decisiones sobre alianzas que se puedan dar tras los resultados de las elecciones andaluzas.
La presidenta regional aseguró que no va a aceptar interferencias en la política de pactos en Andalucía. “No me van a afectar estrategias de partido ni voy a dejar que nadie le diga a los andaluces lo que tenemos que hacer”, añadió.
La dirección del PSOE se ha limitado a apostar en público por que los buenos resultados de los socialistas andaluces no harán necesario alcanzar ningún acuerdo postelectoral. “En Andalucía, vamos a ganar de forma contundente y vamos a tener mayoría suficiente para gobernar en solitario. Estoy absolutamente convencido de ello”, afirmó el portavoz en el Congreso, Antonio Hernando, que no respondió si las federaciones tienen libertad a la hora de pactar o si lo decide el Comité Federal.
Esa es la tónica que prevalece en toda la dirección, que admite que no quiere meterse en el asunto que ha surgido después de que José Bono hiciera unas declaraciones en las que pedía al PSOE una cierta uniformidad en las alianzas. “Si hubiera que pactar, lo que me gustaría es que mi partido no sea una partida de aventureros y que cada uno pacte con quien se le antoje”, subrayó durante la presentación de su nuevo libro, antes de recordar que el PSOE ya lo ha hecho con los republicanos independentistas en Cataluña, con separatistas en Galicia, con el PP en el País Vasco y con Izquierda Unida en Andalucía.
Díaz tendría que consultar a Ferraz
La dirección intenta lanzar balones fuera para no tener que llevar la contraria a la dirigente de la federación con más poder interno en el PSOE. “Lo que siempre ha funcionado es la complementariedad”, señalan fuentes oficiales del partido. “En la historia del PSOE nunca ha habido un conflicto entre el federal y una federación”, añaden sobre las propuestas de pactos que se han llevado a cabo en la regiones.
A pesar de evitar dar una respuesta concreta a la advertencia de Díaz, Ferraz remite a los estatutos del partido para explicar la política de alianzas por la que se rigen los socialistas. Esa normativa interna deja claro que las federaciones hacen una propuesta de acuerdo postelectoral que debe pasar obligatoriamente por la dirección del PSOE. Esto significa que si Díaz requiere a otra formación para mantenerse en el poder, Sánchez tendrá que avalar la decisión. En caso de que haya discrepancias entre Ferraz y Díaz, la propuesta se remitiría al Comité Federal para que tomara la decisión final.
“Los programas electorales de nacionalidad o región, la política de alianzas y el desarrollo legislativo deberán ser consultados con la Comisión Ejecutiva Federal y, si hubiera discrepancias, el contencioso será sometido al Comité Federal”, establece el artículo 85 de los estatutos del PSOE, que se engloba en las normas relativas a los grupos parlamentarios de las comunidades autónomas y de las corporaciones locales.
Ese apartado se complementa con el que establece las funciones del Comité Federal, el máximo órgano entre congresos del PSOE. Así, la normativa que rige a toda la organización establece que le corresponde “determinar la política de alianzas del partido y dirimir las discrepancias entre las Federaciones y la Comisión Ejecutiva Federal en esta materia”.
