El Fiscal pide 14 años de prisión para el acusado de matar a un amigo de 30 puñaladas

El fiscal pide catorce años de prisión para un acusado de matar de más de treinta puñaladas a un amigo de 24 años durante una pelea con él y su pareja, que iba con un bebé de once meses en brazos, en el domicilio de estos últimos en la localidad madrileña de Alcalá de Henares.

El juicio por esta causa se celebrará el martes en la Audiencia Provincial de Madrid y también se sentarán en el banquillo de los acusados la mujer del agresor, que se enfrenta a una petición del fiscal de cinco años de cárcel, por su participación en la pelea y por agresión sexual, informa el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Los hechos tuvieron lugar el 12 de abril de 2011 cuando los acusados, Ángel V.O. y Pilar B.A., coincidieron a las tres y media de la tarde en un bar de Alcalá de Henares con la otra pareja a la que ya conocían y que iba con el citado bebé.

El fiscal añade que comenzaron a beber, primero en el bar y luego en un parque, hasta que a la caída de la noche los acusados comentaron que no tenían dónde dormir, ante lo que sus amigos les ofrecieron su casa, a donde fueron para seguir bebiendo hasta las dos de la madrugada.

Cuando estaban en la casa la acusada echó en falta una pastillas “tranxilium” y le dijo a la otra mujer que ella se las había quitado.

Tras responder ésta que no, se inició una discusión entre los cuatro en el curso de la cual los acusados cargaron contra el dueño de la casa, que huyó.

El fiscal agrega que sin que se sepa cómo comenzó una pelea en la que el dueño de la casa llevaba en su mano una navaja de tipo mariposa y el acusado un cuchillo de cocina.

Según el Ministerio Público, al parecer al primero se le cayó la navaja, circunstancias que aprovechó el acusado para hacerse con ella y causarle a aquel más de treinta heridas por todo el cuerpo, algunas de las cuales acabaron con la vida de la víctima.

La mujer del agredido escuchó cómo su marido gritaba que le estaban matando ante lo que intentó acudir a la cocina pero la acusada se lo impidió tirándola sobre una cama, donde, tras quitarle los pantalones y bajarle la ropa interior, empezó a efectuarle tocamientos lascivos.

En el curso de la agresión regresó el autor del apuñalamiento mortal que amenazó con matar a la mujer y al bebé si les denunciaba.

La mujer logró sacar al bebé de la cuna y salió de la casa gritando y pidiendo auxilio.

La Policía llegó a las 3:25 horas y en el curso de la detención y mientras eran atendidos por los servicios sanitarios la acusada bajó de nuevo la ropa interior a la otra mujer para llevar a cabo más tocamientos hasta que fue reducida por los agentes. El acusado está privado de libertad desde ese mismo día.