Fuerte despliegue policial en Irlanda del Norte ante un homenaje al IRA

El Servicio de Policía de Irlanda del Norte (PSNI) desplegará hoy un fuerte dispositivo de seguridad durante la celebración de un homenaje a miembros del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA) fallecidos en el pasado conflicto.

Después de los violentos disturbios protagonizados el viernes por jóvenes protestantes en Belfast, que se saldaron con 56 policías heridos, el PSNI ha tomado precauciones para que el citado evento transcurra pacíficamente, a pesar de la tensión que se registra en la provincia británica.

El acto tendrá lugar en Castlederg, en el condado occidental de Tyrone, y pretende rendir un homenaje a los caídos del IRA originarios de esta zona de Irlanda del Norte, incluidos dos miembros de esa localidad muertos hace 40 años por la explosión de la bomba que manipulaban.

La celebración del homenaje cuenta con el apoyo del partido Sinn Fein, antiguo brazo político del IRA, pero ha sido criticado por algunas asociaciones de víctimas, las formaciones unionistas y por la ministra británica para Irlanda del Norte, Theresa Villiers.

Villiers ha asegurado que el acto “causa gran dolor” a las víctimas y, aunque ha declarado que no tiene poderes para prohibirlo, sí ha pedido a los líderes republicanos que impongan cierta “contención”.

A este respecto, el viceministro principal norirlandés y “número dos” del Sinn Féin, el excomandante del IRA Martin McGuiness, ha pedido respeto y recordado que el evento no es “una celebración”, sino una “conmemoración” que transcurrirá de una manera “digna”.

Para el jefe del Gobierno de Belfast de poder compartido entre católicos y protestantes, el unionista Peter Robinson, el homenaje representa un simple acto de glorificación del terrorismo.

En este ambiente caldeado, el PSNI teme que se repitan los enfrentamientos del pasado viernes en Belfast, que comenzaron cuando cientos de protestantes se dieron cita en el centro de la capital para impedir el paso de una concentración organizada por la llamada Liga Anti-Internamiento, simpatizante del IRA.

La marcha, que preveía atravesar el centro de Belfast en su trayecto entre el norte y oeste de la ciudad, recordaba la introducción por el Gobierno británico en 1971 de la política de internamiento sin juicio de sospechosos de terrorismo en la provincia en 1971.

También el pasado mes, cientos de policías resultaron heridos tras varias noches de disturbios protagonizados por jóvenes unionistas en el comienzo de la conflictiva temporada de marchas de la protestante Orden de Orange.