Garrido denuncia el “uso fraudulento” de Podemos de las instituciones

El portavoz del Gobierno regional, Ángel Garrido, ha intervenido hoy en el debate de la moción de censura presentada por Podemos contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, para denunciar el “uso fraudulento” de las instituciones por parte de este partido con esta iniciativa.

Garrido ha pedido la palabra tras la intervención del secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid y diputado regional, Ramón Espinar, en base al artículo 113.6 del reglamento de la Asamblea de Madrid, que permite a los miembros del Consejo de Gobierno “intervenir en los debates siempre que lo soliciten”.

“Esto no es una moción de censura (...) no es otra cosa que una feria de las vanidades orquestada por su grupo y partido con un fin: la puesta de largo de la señora Lorena Ruiz-Huerta”, ha dicho en referencia a la portavoz de Podemos en la Asamblea, propuesta por Podemos como alternativa a Cifuentes.

Garrido ha comentado que con “todo este lío de nombres, candidatos y facciones” de Podemos “no es de extrañar que requieran de tiempo, de presencia y visibilidad” en los medios de comunicación y las redes sociales con iniciativas como esta moción de censura “para que sus votantes puedan entender algo de lo que está pasando”.

“Para eso utilicen sus medios, su dinero y no utilicen fraudulentamente esta Cámara con el dinero público de todos los ciudadanos”, ha apuntado.

Con un tono irónico, el portavoz del Gobierno regional ha indicado que en esta puesta de largo (denominación que asegura que usó el propio secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid, Ramón Espinar, en una entrevista) Ruiz-Huerta ha “invitado a sus amigos”.

Entre los dirigentes de Podemos que han acudido al Pleno a seguir el debate destacan el líder de la formación, Pablo Iglesias; el secretario de Organización, Pablo Echenique; la portavoz en el Congreso; Irene Montero; y el secretario de Análisis Estratégico y Cambio Político, Íñigo Errejón.

“Pueden servir de ejemplo de lo que esperaría a los madrileños si usted y sus amigos gobernasen la Comunidad de Madrid”, ha añadido, para augurar a continuación medidas como “un sistema de becas black sólo para los amiguetes de Podemos”, en alusión a la polémica protagonizada por Errejón.

Sobre Ruiz-Huerta, ha afirmado que “no es la heroína que va a salvar una Comunidad en apuros porque no está en apuros” y porque, en su opinión, necesitaría además “varias cualidades de las que carece” al señalar que “no tiene acreditada ninguna experiencia de gestión”.

“La única comparación sería un recién licenciado en Bachillerato que quisiera ser el presidente de Microsoft”, ha sostenido, al tiempo que ha criticado la “soberbia”, “vanidad” y “frivolidad” de la candidata.

Muy crítico con Podemos, ha señalado que “en una de sus purgas soviéticas desterraron” al anterior portavoz en la Asamblea, José Manuel López, y Errejón “fue purgado en el mismo proceso y condenado por el líder supremo”, en referencia a Pablo Iglesias, a lo que “entiende como el gulag de nuestros días, la Comunidad de Madrid”.

A pesar de que no tenía límite de tiempo, la presidenta de la Asamblea de Madrid, Paloma Adrados, le ha instado a terminar para no prolongar más de la cuenta el debate.

A continuación, Ciudadanos ha rehusado hacer uso de su turno de palabra, pero sí han intervenido representantes del resto de grupos parlamentarios.

Espinar le ha dicho que del uso fraudulento de las instituciones no debería dar “ni media lección” el PP, mientras que el diputado regional de Podemos Jacinto Morano ha reprochado a Garrido que intervenga él en lugar de Cifuentes.

“Lo que tiene que hacer Cifuentes en este momento es dimitir por respeto a los madrileños. Creíamos algunos que el plasma, el mandar el número dos a los debates era solo patrimonio de Mariano Rajoy”, ha apuntado.

La diputada del PSOE-M Pilar Sánchez Acera ha vuelto a quejarse de que Garrido haya podido tomar la palabra en ese momento del debate al sostener que el capítulo del reglamento de la Asamblea dedicado a la moción de censura no contempla esta posibilidad.

Una crítica compartida por Podemos, que ha llevado a Garrido a cuestionar las “condiciones democráticas de la izquierda”.

“En una moción de censura al gobierno no quieren que pueda intervenir el gobierno, está todo dicho de cómo ven la democracia”, ha alertado.