El esquivo George Clooney y la ficción de Disney se esfuman de Valencia

El esperado rodaje en Valencia de “Tomorrowland”, la cinta futurista de Disney que protagoniza George Clooney, ha acabado un día antes de lo previsto, y el engranaje artístico y logístico de esta superproducción apenas deja ya unos andamios para el recuerdo en la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

La noticia cinematográfica y social del año en Valencia ha dejado muy pocas evidencias: Clooney llegó al aeropuerto de Manises el pasado día 19, se alojó en el hotel Westin y asistió a varios días de rodaje en la terraza lateral del Museo de las Ciencias Príncipe Felipe y el Hemisféric, de los cuales solo hay constancia gráfica de uno de ellos y durante unos breves minutos. Eso sí, sonriente.

Su deseo de permanecer totalmente alejado de los medios se ha cumplido así a rajatabla: de los once días que, en principio, ha permanecido en la ciudad, apenas hay noticia más allá de que habría cenado en una ocasión en un pequeño restaurante italiano.

Una foto en el diario Las Provincias de hoy en la que se le ve de espaldas y con una mochila al hombro en el aeropuerto es la única prueba de la marcha de la estrella del cine y reclamo publicitario.

La productora de la cinta rodeó todo el rodaje de un mutismo absoluto y estableció un amplio perímetro de seguridad en torno al escenario del rodaje, que albergaba dos naves espaciales, mientras los cerca de 400 extras que han participado en él habían tenido que firmar un riguroso contrato de confidencialidad.

Solamente una autoridad regional, el conseller de Economía, Máximo Buch, ha reconocido hoy haber accedido, anoche, al interior del rodaje para asistir a la grabación de la última escena prevista en Valencia.

Esta mañana, Buch ha valorado orgulloso ante los periodistas que el rodaje de estos días supone “un publirreportaje” de media hora de la Ciudad de las Artes y las Ciencias en una película de Disney, “que van a ver 50 millones de espectadores en el mundo. Eso tiene un valor publicitario incalculable”.

“Varios años de presupuesto de la Generalitat para promoción turística no cubren lo que vale que haya un publirreportaje de 30 minutos de la Ciudad de las Artes y las Ciencias: el impacto va a ser impresionante”, ha añadido.

Además, el conseller de Economía ha enfatizado: “Ayer, la directora de comunicación de Disney me dijo que están previstos 50 millones de pases de la película, a los que después se añaden los de descargas de internet y la gente que a lo largo de los años pueda verla; se espera una recaudación a corto plazo de la película de 500 millones de dólares”.

Son cifras astronómicas para una ciudad que no está acostumbrada al rodaje de superproducciones como “Tomorrowland”, la cual también ha permitido ver brevemente al famoso doctor House, Hugh Laurie, el otro protagonista de esta cinta de ciencia-ficción dirigida por Brad Bird, ganador de dos Óscar por “Los increíbles” y “Ratatouille”, que comenzó su rodaje en Canadá y se estrenará en diciembre.

Se da la circunstancia de que uno de los puntos donde también se ha rodado, el Palau de les Arts Reina Sofía, también diseñado por Santiago Calatrava, está cerrado al público desde finales de diciembre a consecuencia de unos desprendimientos que sufrió de parte del revestimiento cerámico de su cubierta, el cual aún está siendo retirado por completo por alpinistas.

El rodaje ha obligado también a cortar puntualmente durante varios días el tráfico en el puente de Monteolivete, que separa al coliseo operístico del resto de edificios de la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

Esta ha sido, aparentemente, la única alteración de la vida diaria que ha sufrido Valencia a causa de este rodaje, que empezó a desplegar su enorme engranaje el pasado día 8 y ha dado el último golpe de claqueta con un día de antelación sobre el calendario previsto.

Y es que, según se limitan a decir desde la productora, “todo ha ido muy bien”.