El Gobierno de Asturias retira el Proyecto de Presupuestos y asume que habrá prórroga en 2016

El ejecutivo asturiano ha adoptado esta decisión (por primera vez en la historia de la democracia, tras la dictadura franquista) después de que los partidos de la oposición (PP, Podemos, Foro y Ciudadanos), excepto Izquierda Unida (organización con la que los socialistas habían pactado la propuesta presupuestaria) presentasen una enmienda a la totalidad de las cuentas regionales para 2016.

El consejero de Presidencia y Portavoz del Gobierno, Guillermo Martínez, comunicó la decisión este martes a la Junta de Portavoces del parlamento autonómico. Posteriormente, en declaraciones a los medios, ha explicado las razones del ejecutivo, y ha sido especialmente crítico con el grupo de Podemos Asturies.

Ante el “bloqueo parlamentario por las cuatro enmiendas a la totalidad presentadas y, sobre todo, la actitud saboteadora de Podemos, que no tuvo la vergüenza y el valor de comunicar una decisión que ya había tomado inicialmente”, ha matizado.

“TODO HA SIDO UNA GRAN MENTIRA”

Según Martínez, la negociación con Podemos ha sido “una gran mentira, una farsa, porque el Gobierno ha jugado con las cartas boca arriba y ha negociado hasta el último minuto, mientras que Podemos se ha saboteado y se ha sumado al frente del no (en alusión a Foro y PP), porque es el mejor aliado de la derecha”.

Lastra, por su parte, ha sido tajante a preguntas por el escenario que se abría tras esta decisión: “se acabó el proyecto de ley”. “En el momento en que se da una coincidencia entre Podemos y el PP se acaba cualquier posibilidad de que el presupuesto pueda seguir”, ha añadido Lastra. Entre otros puntos, ha comentado la confluencia 'populares' y 'podemistas' a la hora de criticar los impuestos.

El portavoz de Izquierda Unida en la Junta, Gaspar Llamazares, ha incidido en la idea de confluencia de intereses políticos entre Podemos y el PP, y ha instado a ambos partidos a que “configuren un gobierno” conjunto. En su opinión, la retirada del proyecto “deja un escenario en el que hay un gobierno en minoría, y un parlamento con mayoría del PP y Podemos, eso producirá un choque de legitimidades, que habrá que despejar”.

PUERTA ABIERTA A LA NEGOCIACIÓN

Unas declaraciones en las que la diputada de Podemos, Lorena Gil, no ha querido entrar, y ha responsabilizado únicamente al Gobierno de la retirada, por no plantear “unos presupuestos a la altura de las necesidades de la gente”, dejando eso sí, la puerta abierta a la negociación de otra propuesta.

“Ellos apostaban más por una prórroga de los presupuestos pactados por el pp”, ha señalado Gil, que ha incidido en algunas demandas de exigidas por su formación y que el Gobierno no ha aplicado: ley anticorrupción, solución a los problemas de listas de espera en sanidad y salario social o alivio aliviar la presión fiscal “para quienes no tienen cuentas en Suiza” y subida para los grandes patrimonios.

Enma Ramos, del PP, también ha recordado que el proceso de negociación “puede seguir abierto”, y ha responsabilizado al Gobierno de la retirada del proyecto, un acto que considera “de cobardía”, y una “huida hacia adelante”, cuando culpan a otros grupos de la decisión. “Ha dejado tirados a todos los asturianos”, considera la diputada 'popular', que recuerda que su partido hubiese aprobado la propuesta si se hubiesen eliminado los impuestos de donaciones y sucesiones y los dos nuevos tributos medioambientales creados en las cuentas de 2016.

El portavoz de Ciudadanos, Nicanor García, ha señalado que su grupo se mantendrá a la espera de una nueva propuesta y ha destacado la “coherencia” de su partido, que desde un primero momento anunció una enmienda a la totalidad.

Más crítica ha sido Cristina Coto, la portavoz de Foro Asturias, que entiende que el presidente autonómico, Javier Fernández, “debe asumir ”algún tipo de responsabilidad“ ante este ”fracaso“ en la negociación, teniendo una clara mayoría parlamentaria de izquierdas.