El Gobierno de Cuba prepara una ley sobre las funciones y los servicios policiales

El Gobierno de Cuba trabaja en la elaboración de una “Ley de Funciones y Servicios Policiales” con el objetivo de garantizar la “tranquilidad ciudadana” e institucionalizar la Policía, informó hoy la prensa oficial.

La propuesta de esa norma se presentó el pasado viernes en una reunión del Consejo de Ministros de la que se ha informado hoy lunes y estuvo encabezada por el presidente de la isla, Raúl Castro, según publica el periódico “Granma”, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba (PCC, único).

Esa nueva ley sobre los servicios de la Policía estaría en concordancia con uno de los objetivos recogidos en el plan de reformas del Gobierno de Raúl Castro (o “lineamientos”, como se conocen en Cuba), concretamente el que pide que se siga “preservando las conquistas de la revolución”, entre ellas “la tranquilidad ciudadana”.

De ese modo, el ejecutivo del país comunista trabaja “en la institucionalización de las funciones y los servicios policiales”, según dijo ante el Consejo de Ministros el segundo jefe de la Comisión Permanente para la Implementación y Desarrollo de las reformas, Leonardo Andollo.

Los objetivos de la futura normativa serán “garantizar el orden público, la defensa y la protección de los derechos ciudadanos, en cooperación con los órganos y organismos estatales, entidades económicas, instituciones sociales y los ciudadanos”, así como “fortalecer la autoridad, la protección y el respaldo legal de las fuerzas” policiales.

Andollo Valdés precisó que en el documento presentado se establecen “conceptos básicos de actuación policial”, como el respeto a la Constitución y las leyes, el trato profesional, ético y humano, la actuación bajo identificación previa, así como la celeridad y racionalidad en el trabajo.

Otro tema tratado en la reunión del Ejecutivo fue el proceso para la unificación monetaria y cambiaria en la isla, recién abierto por el Gobierno y que el vicepresidente y coordinador del plan de reformas económicas, Marino Murillo, calificó de “extremadamente complejo”.

Murillo insistió en señalar que su aplicación resulta “imprescindible” para restablecer el valor del peso cubano y de sus funciones como dinero.

Sobre el inicio del proceso explicó que más de 20.000 dirigentes y funcionarios han participado ya en seminarios de preparación acerca de las normas emitidas para eliminar la dualidad monetaria.

La unificación monetaria es una de las reformas más complejas de las emprendidas en Cuba, donde actualmente circulan dos monedas: el peso cubano, muy debilitado y con el que la mayor parte de la población cobra sus salarios y paga productos y servicios básicos; y el CUC, la moneda fuerte convertible en divisa y equivalente al dólar.