El nuevo Gobierno peruano afina sus propuestas con un enfoque en las regiones

El nuevo Gobierno de Perú dedicará los próximos días a afinar los detalles de una gestión que enfatizará el trabajo con las regiones del interior del país para alcanzar la “revolución social” anunciada, ratificaron hoy el presidente Pedro Pablo Kuczynski y su primer ministro, Fernando Zavala.

Tras haber asumido el mando el jueves pasado con un anuncio de “revolución social” y combate a la corrupción y la inseguridad, Kuczynski confirmó hoy que sus ministros preparan los detalles que presentará ante el Congreso, a más tardar el 15 de agosto.

Kuczynski dijo que Zavala y el gabinete detallarán ahí la forma en que se financiarán ofrecimientos como la instalación de agua potable para todos los peruanos y “qué cobertura va a haber.”

Además, por qué plantean reducir el Impuesto General a las Ventas (IGV), fijado actualmente en 18 %, de manera progresiva, y cómo eso “va a poner plata en los bolsillos de la gente”.

También cómo harán “para destrabar” la construcción y el acceso a viviendas, así como otras obras de infraestructura.

Kuczynski, quien participó hoy en una ceremonia de acción de gracias de la iglesia evangélica, reiteró que busca alcanzar “un país unido, con reformas sociales”, durante su Gobierno, que culminará en 2021 con las celebraciones del bicentenario de la independencia peruana.

En la que fue su primera medida de lucha contra la inseguridad ciudadana, el nuevo Gobierno prorrogó hoy durante 30 días el estado de emergencia (excepción) en la provincia del Callao, anexa a Lima.

Según una resolución publicada en el diario oficial, la Policía Nacional mantendrá el control del orden interno, que ya ejerce desde el año pasado, cuando el gobierno de Ollanta Humala declaró el estado de excepción para combatir a la delincuencia común y al crimen organizado, incluido el narcotráfico, en el Callao.

Durante el estado de emergencia quedan suspendidos los derechos constitucionales relativos a la libertad y seguridad personales y la inviolabilidad de domicilio.

Kuczynski dijo hoy que considera que la medida solo se mantendrá durante 30 días, mientras se comienzan a implementar las acciones que tomará el nuevo ministro del Interior, Carlos Basombrío.

Fernando Zavala, por su parte, anunció a los medios que el Gobierno enfocará su trabajo en las regiones con el objetivo de impulsar el desarrollo fuera de Lima.

“Por el bien de los peruanos se debe emparejar la cancha entre la capital y el resto del país. Tenemos que enfocarnos en las otras regiones, generalmente no atendidas, por eso PPK habla de él mismo ir a las regiones. Los seis grandes objetivos que mencionó deben ser iguales para todos, pues las grandes brechas están fuera de Lima”, dijo.

Durante su discurso de inauguración de mandato, Kuczynski mencionó como grandes ejes de su gestión al acceso al agua potable para todos los peruanos, la mejora de la educación pública gratuita y los servicios de salud, la reducción del IGV, la construcción de infraestructura y la lucha contra la corrupción.

“Lo que nos falta en el Perú para dar el siguiente gran paso es enfocarnos en la gente, en el ciudadano. Eso es lo que significa revolución social, cómo hacer que todos tengan los mismos servicios públicos”, explicó Zavala.

El jefe del Gabinete dijo que espera reunirse con la presidenta del Congreso, la fujimorista Luz Salgado, en los próximos días para ir preparando la presentación de los ministros, que planteará que sea el 15 de agosto para pedir el voto de confianza del legislativo.

El mensaje de toma de mando del presidente ha sido bien recibido por la ciudadanía, diversos sectores políticos y los analistas, aunque se ha resaltado que la bancada del partido fujimorista Fuerza Popular en el Congreso no aplaudió ninguno de sus anuncios.

Además, la líder de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, publicó el jueves un mensaje en las redes sociales en el que anunció que su partido impulsará su plan de gobierno desde el Congreso, que dominará al ocupar 73 de los 130 escaños.

Kuczynski derrotó a Fujimori en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, del pasado 5 de junio, por poco más de 41.000 votos de diferencia.

El presidente rechazó hoy las críticas que han hecho los fujimoristas a su discurso, que consideraron lleno de generalidades, y enfatizó que “el mensaje fue clarísimo”.

“A mí las críticas me entran por aquí y me salen por allá”, enfatizó señalándose las orejas.

“En el Perú debemos construir”, enfatizó el mandatario, antes de agregar que los fujimoristas “tienen derecho a criticar”, pero “el que está manejando el carro soy yo”.