Godard se niega a colaborar con el museo del Hermitage por el caso Sentsov

El cineasta francés Jean-Luc Godard se negó a colaborar con el Hermitage de San Petersburgo debido a la situación de Oleg Sentsov, director ucraniano que cumple 20 años en una cárcel rusa por supuestas acciones terroristas en Crimea, según informó hoy el museo ruso.

“Lamentablemente, Godard nos comunicó hace unos días que debido al caso Sentsov no ve posible visitar el Hermitage”, señala el comunicado.

Godard, que firmó en los últimos meses varios llamamientos del mundo de la cultura en favor de la liberación del realizador ucraniano, debía haber viajado a antigua capital zarista en diciembre.

El Hermitage explica en la nota que fueron los socios franceses del museo quienes plantearon la posibilidad de realizar un “proyecto conjunto” con el creador francés.

“Yo siempre repito la misma fórmula: en condiciones de tensión política los puentes culturales son los últimos que deben ser destruidos. El Hermitage y yo hacemos todo lo posible para aplicar ese principio”, dijo hoy Mijaíl Piotrovski, director del Hermitage, una de las principales pinacotecas del mundo.

El pasado 9 de noviembre artistas, cineastas y otras personalidades del mundo de la cultura, entre ellos Godard, publicaron un manifiesto en el diario Le Monde en el que pidieron a la comunidad internacional que presionara a Rusia para que libere a Sentsov.

Sentsov fue galardonado el pasado 25 de octubre con el premio Sájarov a las Libertades y los Derechos Humanos poco después de suspender su huelga de hambre que se prolongó durante 145 días.

Recientemente, el cineasta hizo público su testamento en el que cede todas sus pertenencias a sus dos hijos y encarga a su amigo Yevgueni Vradi la dirección de sus cinco guiones, tres de los cuales, “Un mundo brillante”, “Cuervos” y “Cristi”, fueron escritos entre rejas.

Desde la detención de Sentsov en mayo de 2014 Ucrania demanda su liberación, pero Rusia argumenta que al nacer en Crimea, península anexionada por Moscú en marzo de 2014, Sentsov también es automáticamente ciudadano ruso, por lo que no puede ser extraditado.

Estados Unidos, la Unión Europea y Amnistía Internacional han demandado en numerosas ocasiones su liberación, pero el presidente ruso, Vladímir Putin, nunca ha reconocido la existencia de presos políticos en Rusia.