Guerra rechaza la “consulta continua” y pide “gallardía” para decir que “hay asuntos sobre los que no se puede votar”

El expresidente del Gobierno Alfonso Guerra ha alertado del riesgo de entender la democracia como una “consulta continua” y ha pedido “gallardía” a los dirigentes políticos para que digan que “hay asuntos sobre los que no se puede votar” ni elegir según lo que prefiera una mayoría. “El demos no es superior a la ley, no todo se puede decidir por mayoría”, ha defendido.

Alfonso Guerra ha intervenido, junto al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en el encuentro 'Los retos de la calidad de la democracia en el siglo XXI', unas jornadas organizadas por la Fundación Sistema -- que preside el exvicepresidente-- y en las que ha alertado de la “grave crisis de representación” que se vive actualmente en España, entre otros factores, por los casos de corrupción que “agujerean” al partido del Gobierno y que los ciudadanos contemplan con “espanto”.

El histórico dirigente socialista, que ha anunciado recientemente que abandona su cargo como diputado tras casi 40 años, ha avisado de que aumenta la “hostilidad” con la que los ciudadanos perciben la democracia, un sistema que “flaquea” debido a cuestiones como la falta de respeto hacia las instituciones, la escasa ejemplaridad de los políticos o la pérdida del consenso social sobre el sistema político.

Guerra ha identificado en la “democracia telemática” un riesgo de desvirtuar la democracia misma. “Se vive hoy un espectacular conflicto acerca de los referéndum”, ha dicho antes de matizar que “esta consulta universal es en teoría un avance, pero dependerá de si se garantiza la limpieza y la equidad”. Además, ha recordado que hay cuestiones como decidir la política de inmigración o los derechos sociales de minorías que no pueden ser decididos por mayorías.

CATALUÑA Y EL CHOQUE DE TRENES

“No se puede votar ni decidir sobre derechos de los ciudadanos”, ha continuado Guerra, que ha rechazado que se recurra a la metáfora del choque de trenes para definir la situación política en Cataluña. “Lo que hay es un tren que se ha salido de la vía y le encienden luces para avisarle de que se ha salido de la vía; y el otro tren, está parado”, ha comentado sobre el planteamiento nacionalista defendido por Artur Mas y, de otro lado, la respuesta del Gobierno de Mariano Rajoy.

No obstante, según Guerra, la crisis en Cataluña en la actualidad es que quien representa la máxima autoridad del Estado en esta comunidad autónoma “intenta burlar todos los días al Estado”.

Además, el exvicepresidente del Gobierno la lamentado la imagen que transmiten los políticos recurriendo también a casos, aunque sin citarlos explícitamente, como el del presidente extremeño, José Antonio Monago. En concreto, se ha quejado de quienes “se resisten a pensar que por ser personas públicas tienen limitados sus derechos” y que, por tanto, “sus actos públicos y privados soportan un escrutinio superior al resto de los ciudadanos”.

NO AL PARTIDO ÚNICO

Guerra, que ha recibido el reconocimiento de los organizadores de las jornadas y del líder del PSOE, ha incluido en su repaso a las amenazas de la democracia la “tozuda negación” de la derecha y la izquierda en la ideología política. Cuando esto lo asume la izquierda, ha avisado, “incumbe en el deseo de desaparecer”.

Según él, otro de los mayores riesgos es que se ha instaurado una suerte de “partido único” que entiende que no hay política posible más allá de la contención del gasto y la reducción del déficit“, lo que ha calificado como ”la religión del siglo XXI“ a pesar de que ”los ciudadanos le dan la espalda a esta situación“. ”Ahora casi todo es infinanciable“, ha criticado.

También ha alertado de la creciente desigualdad para recordar que ayuntamientos como el de Sevilla “por fin” se preocupen de quienes pasan hambre y buscan alimentos entre las basuras, aunque ha censurado que lo que pretende es imponer multar de 750 euros. “Oiga, si tuvieran 750 euros no estaría rebuscando en la basura”, ha comentado con ironía. “No hay imposibles para el horror”, ha concluido un Guerra que ha señalado que la falta de inclusión de “varias generaciones de jóvenes” es la antesala para que aparezcan los demagogos o los nacionalistas.